Eres una bruja encerrada en una mazmorra, tú misión es escapar, recuperar tus poderes y enfrentarte a la reina malvada.

Para enfrentarte a los peligros del lugar conseguirás un arco con el que no es nada fácil apuntar, espadas, mazas, escudo, bombas. Lo tipico, sin más. Los poderes mágicos tienen más gracia, son solamente 2: una especie de lanza-redes de Spiderman y posesión de los muertos (manejar esqueletos a distancia y obligarles a que hagan cosas por ti).

Los gráficos del castillo están bastante bien, todo luce moderadamente espectacular. Pero el pésimo movimiento de los enemigos hace que el juego parezca más cutre de lo que es. La verdad es que murciélagos, perros, esqueletos y caballeros te atacan de una forma ortopédica y bastante lamentable. Sin embargo la aprte de acción no es la importante, en el juego se avanza resolviendo puzzles que son interesantes y nada complicados.

La batalla final contra la reina podría estar mejor resuelta, hay mimbres para que fuera más espectacular.

En 5 o 6 horas, juego terminado. Ideal como suscripción de VivePort, porque pagar 20€ es demasiado, una vez terminado se acabó, rejugabilidad nula.

Audio, menús y subtítulos en inglés. Quizá no haga falta entenderlo todo, pero hay bastante narrativa y algunas pistas para resolver los puzzles.

Si la parte de acción hubiera estado mejor resuelta, si se hubiera explotado más los poderes mágicos y si el juego fuese más largo, estaría dando palmas con las orejas. Porque el juego me ha divertido, la historia es interesante y dan ganas de seguir en ese mundo de fantasía. Pero como tantos juegos en VR, la cosa se queda a medias.