Carnival Games VR - PlayStation VR: ANÁLISIS

¡Póngame una docena de minijuegos, por favor!

El título que nos ocupa es muy sencillo de resumir: se trata de una colección de 12 minijuegos para todos los públicos. No se nos ocurre mejor manera de describirlo, pues todo lo demás es tan solo un añadido o una excusa para jugarlos. Tiene un cierto regusto a otros títulos de ese género, tan presentes en Nintendo Wii, como podía ser por ejemplo Wii Play o Wii Sports (las comparaciones son odiosas porque probablemente salgan ganando estos últimos). De hecho, Carnival Games formaba parte del catálogo de Wii y de NDS y, en este sentido, lo que aquí nos encontramos es una variación o reinvención para la realidad virtual del citado título. Por cierto, no se nos escapa que el número de minijuegos ha sido reducido, pues teníamos 25 en Wii y 30 en DS. 

Mecánica, jugabilidad e inmersión

Nos situaremos de pie con ambos Move y empezaremos el juego dentro de un parque virtual. Los visitantes pasean de un lado a otro, vemos algunas atracciones al fondo y suena música agradable para crear una atmósfera un tanto circense. El tono general es divertido con un toque algo infantil muy acorde, por su parte, a un título de este género. Pueblan el entorno personajes que recuerdan bastante a aquellos miis del universo Nintendo si se nos permite la comparación, una vez más. El maestro de ceremonias, un monigote de estética charlestón con bigote, bombín y bastón cumplirá con su función con el tradicional ¡pasen y vean! de rigor en estos casos. A partir de aquí, desde nuestra posición estática en el centro de la plaza, señalaremos con los Move y así nos trasladaremos al punto deseado. Este sistema es práctico y rápido, pero su simplicidad resta inmersión, tal vez nos habría gustado movernos de una forma más natural. Desde la plaza principal tenemos acceso, entre otras opciones, a otras 4 plazas circulares supuestamente temáticas (son prácticamente iguales unas de otras) que incluyen 3 minijuegos cada una, además de una caseta de premios (tienda) y una playroom. A pesar de los contras señalados, en general, hasta aquí el juego se siente bien y queremos descubrir qué nos ofrece.

La dinámica es fácil: inicialmente tenemos abierta una de las plazas, concretamente el corral vaquerizo, y dos de los minijuegos de esta plaza, Brazo de oro y Galería de tiro. Para desbloquear el resto tendremos que conseguir tickets jugando a los minijuegos para canjearlos posteriormente en la caseta de premios donde, además, podremos comprar juguetes coleccionables para decorar el playroom. El título no es nada exigente en este sentido y resulta fácil desbloquear todo el contenido jugable en poco tiempo. Según cómo lo hagamos en cada minijuego, conseguiremos 1, 2 ó 3 estrellas que nos recompensarán con 5, 10 ó 25 tickets respectivamente. Además tenemos un ranking online y de amigos que, aunque es muy simplón, se agradece para estimular la superación de puntuaciones.

Valoración de los minijuegos

En general todos ellos son medianamente aceptables y el regusto general que nos dejan es bueno pero no podemos ignorar los fallos presentes en alguno de ellos que, como vamos a ver, no van todo lo fino que deberían y empañan un poco el resultado final. Podemos decir que los minijuegos son de una calidad irregular. Es por ello que procedemos a comentarlos brevemente uno a uno. Los 12 minijuegos que incluye Carnival Games VR son:

- Brazo de oro: Lanzamos tres bolas a botellas apiladas y nos dan puntos por tirarlas en distintas disposiciones. Las sensaciones y la precisión en este juego al lanzar la bola es muy buena. 

- Galería de tiro: En un escenario nos aparecen dianas móviles y otros objetos a los que tenemos que acertar con nuestras dos pistolas. Si acertamos de forma continuada los objetivos sin fallar, los puntos se irán multiplicando x2, x3, etc... Este juego es bueno.

- Pasillo bola: Tiramos bolas que deben caer en casilleros circulares con distintas puntuaciones para sumar lo máximo posible. En este juego el control no está tan bien conseguido como en los anteriores, pero es suficiente. 

- Casa encantada: Es un paseo en trenecito por una casa encantada para niños donde tenemos que disparar con nuestras dos pistolas durante el recorrido. Es un Rush of Blood pero con susto cero. Hay multiplicador de puntos como en galería de tiro. Este juego va muy bien y es muy divertido.

- Tanque tiburón: Disparas a una diana que va cambiando de tamaño o se vuelve móvil según acertamos. Al darle al objetivo un figurante cae en un tanque de agua que tiene debajo. Es bueno.

 - Apilador de frisuelos: Nos tiran tortitas desde la distancia y las debemos recoger usando dos bandejas, una en cada mano. Cuanto más recojamos y menos se nos caigan más puntos obtendremos. Es inevitable reírse. Es bueno.

- Dardos reventones: Tiramos dardos para acertar dianas y explotar globos. Este juego es un desastre en cuanto a precisión, resulta poco jugable.

- Muro de escalada: Debes hacer un circuito de escalada en el mínimo tiempo posible. Es una propuesta curiosa que consigue dar sensación de altura, pero no nos parece del todo preciso en algunos aspectos. Es aceptable.

- Lanza aros: Tenemos 8 aros para introducirlos en palos y obtener la máxima puntuación posible. Aquí hay que tener cuidado pues los aros, acertados o no, se quedan en el tablero y molestan para las posteriores tiradas. Este juego está bien conseguido.

- Recta Final: Es una carrera de caballos que avanzan conforme vamos introduciendo unas bolas en los agujeros apropiados. Para ganar más tickets hay que llegar lo antes posible a la meta. Es un juego aceptable.

- Lanzamiento rápido: Nos lanzan de bolas y las tenemos que recoger con un guante de beisbol. Este juego nos ha parecido que no tiene buena precisión. 

- Fiuu: Debemos encestar los máximas canastas posibles con balones de baloncesto. Para ser más rápido hay que usar las dos manos. Este juego está muy bien.

Apartado técnico

El sonido en cada uno de los minijuegos y en general por todo el entorno, nos evoca a una atmósfera festiva dentro de esta feria virtual. El ambiente que se respira es relajado y esto en gran parte es por la música. Digamos que en este apartado el juego cumple y es efectivo sin grandes florituras. Por su parte, durante el desarrollo de los juegos el animador va haciendo comentarios en español (está doblado a nuestro idioma) que, si bien motivan en cada una de las intentonas durante los juegos, resultan un tanto aleatorios y en ocasiones llegan incluso a desentonar. En cuanto al apartado gráfico, se queda un poco justo y, en cierto modo, se percibe como mejorable, a pesar de ser un título que por su naturaleza no precisa de un alto nivel de realismo. 

Conclusión

De antemano estábamos ante un título modesto y tal vez no demasiado atractivo, pero una vez metidos en materia, la propuesta era bastante interesante. A priori, con las primeras impresiones jugables sobre la mesa, aparentaba ser un título algo superior, pero no es este el balance final de Carnival Games VR, pues existen algunos puntos flacos que no pueden ser pasados por alto, tal y como hemos señalado a lo largo del análisis. Tal vez con un mayor cuidado en el pulido de los minijuegos, pilar sobre el que se apoya totalmente el título, estaríamos delante de un juego más sólido y con más empaque. De hecho es bienvenida, por nuestra parte, la llegada al catálogo de PSVR de algún título de minijuegos o similar, siempre y cuando nos ofrezcan unos ciertos mínimos de calidad. Carnival Games VR no llega hasta ese rasero a nuestro entender y es una pena porque creemos que se podría haber hecho mejor con muy poco más. Aún así, también debemos señalar sus bondades, que las tiene. Se trata de un juego que tiene una duración adecuada y a cierto nivel es un party game muy apto para toda la familia. Ciertos minijuegos son una delicia y al final nos vemos intentando superar nuestra puntuación una y otra vez. Por todo lo dicho y con una cierta espinita clavada, le otorgamos una calificación de ACEPTABLE.