Interkosmos 2000: ANÁLISIS

Tecnología punta

¡Привет y bienvenido al año 2000! La tecnología ha avanzado a pasos agigantados desde que la primera parte de Interkosmos, inspirada en 1970, nos llevó al espacio (aunque los gráficos tal vez no tanto), y expertos de la ingeniería aeroespacial han trabajado estos 30 años virtuales para que ese conocimiento fuera pasando al mundo real hasta llegar a los desarrolladores del estudio Ovid Works, seleccionándonos como el privilegiado humano altamente entrenado para controlar el avanzado sistema de vuelo que maneja un transbordador espacial. Pongámonos el casco (la seguridad ante todo) y salgamos al espacio, ¿estás listo?

Peligros del espacio

Por más entrenado que estés, el espacio es un lugar, aunque bello, altamente inhóspito, que nos expone a inmensidad de peligros a nosotros, simples seres que evolucionamos para vivir en un cómodo entorno terrestre, por lo que sobrevivir allá afuera no es fácil. Y aunque "estamos en el año 2000", la tecnología que nos provee la agencia espacial digamos que no es "tan confiable", haciendo que cualquier despiste nos lleve a ser un cuerpo inerte más vagando por el espacio, o en su defecto una hermosa estrella fugaz desintegrándose en la atmósfera.

Pero no entremos en pánico, la idea es reducir en lo posible esas minúsculas eventualidades, razón por la cual se nos propone un completo tutorial que va desde desplazar y rotar la nave, hasta entrenarnos en la capacidad de conectarnos delicadamente a un modulo espacial, pasando por detalles como arreglar el flujo eléctrico, las fugas de gas y los niveles de presión, pues eso de que haya suficiente oxigeno en la nave dicen que es como importante; o evitar llegar a temperaturas cercanas a los 200 °C, pues puede ser un poco incómodo... solo un poco. Este tutorial me pareció muy completo, con unos 40 minutos de juego y mecánicas bien abordadas, una por una, sin sentirse como algo aislado sino más como una introducción en que ya se nos adentra en materia.

Una odisea en el espacio

Puestos en el traje de un astronauta (o cosmonauta, la historia no lo hace explicito) debemos usar nuestro avanzado entrenamiento y comunicarnos constantemente con las bases en tierra para hacerlo todo correctamente y no perecer. Los poderosos motores nos elevan a toda aceleración hasta alcanzar velocidad de escape, la atmósfera deja de ser una limitante para nuestra supremacía tecnológica y entramos en orbita a 400 km sobre el nivel del mar. ¡Eureka! Espera, ¿qué? ¿La radio se ha dañado? Tranquilo, cadete, aunque no te escuchemos se te informará todo mientras monitorizamos tus movimientos, para eso disponemos de un encargado de la NASA, de la ESA y de Roscosmos que te apoyaran durante la misión, no hemos llamado a nadie de la CNSA (Administración Espacial Nacional de China) debido a que no estamos colaborando con ellos en esta importante misión relacionada con la ISS (Estación espacial internacional).

El transcurrir del juego se centra en el manejo de la nave y la supervivencia, todo en posición sentada, con desplazamientos dentro del pequeño transbordador por medio de agarraderas, algo que no considero sea razón de mareos en términos generales, exceptuando por alguna rotación al pasar al segundo módulo que sí se siente un poco extraña.

La experiencia está diseñada para que no se arruine todo de golpe, sino que distintos fallos se presentan uno a uno de forma que entendamos cómo solucionarlo, progresivamente al punto de que el principio me pareció fácil e incluso creí que no moriría... qué iluso fui. A medida que transcurren los diálogos que se nos envían desde la Tierra, se nos indican las misiones que tenemos que hacer, las cuales son en su mayoría sencillas, como desplazarnos o acoplarnos a algún modulo espacial, aunque hay que tener especial cuidado o podríamos tener un choque no deseado, o salirnos de orbita más de lo esperado; sin embargo, en el modo de juego normal hay algunas asistencias leves que nos ayudan a reubicarnos en algunos casos particulares, por lo demás habrá que pilotar bien la nave, cosa que no es para nada trivial.

Entonces, si los mayores peligros no están afuera, ¿qué nos puede matar? La realidad es que casi todos los problemas vienen del interior, de la cabina. Bien, no es solo morir o vivir, sino que hay que evitar que la nave se descontrole, pues los sistemas de vuelo pueden fallar y tendremos que arreglarlos golpeándolos con una llave inglesa, o en el caso del sistema eléctrico debemos estar atentos a que la energía sea suficiente, aunque no demasiada o se podría sobrecargar; además, los fusibles son delicados y de tanto en tanto se queman, obligándonos a cambiarlos.

Pero con diferencia, nuestra mayor preocupación es el sistema de gases. Tal vez recuerdes que a mayor presión se tienen mayores temperaturas, y aquí es igual: si no queremos una nave a 200 °C hay que revisar constantemente que se liberen los gases de la cabina, sin descuidarlo, porque de lo contrario nos quedaremos sin oxígeno. Además, el oxígeno poco a poco se convierte en dióxido de carbono, por lo que tampoco es buena idea que éste aumente demasiado, teniendo también a la mano una fuente de nitrógeno para regular la presión sin desbalancear los otros valores, aportando al igual que en la Tierra, donde la mayor composición del aire es este gas inerte para nuestra respiración, de forma que el sistema de la cabina tiene sentido y es algo que me ha gustado.

De todas formas esos no serán todos los problemas que nos dará dicho sistema, se puede volver algo más caótico dadas ciertas fallas, pero dejaré que lo descubras por ti mismo.

Piloto espacial

Maniobrar la nave es uno de los principales encantos del juego; apoyados en un sistema similar a una realidad aumentada muy simplificada, vemos cómo al bajarnos la visera del casco obtenemos algunas ayudas que complementan los sistemas de navegación. Claro que si esto nos incomoda, siempre podemos volver a abrir el casco. En la parte delantera tenemos un sistema básico: palanca de dirección, acelerador y freno, que se complementa con switches para alternar entre tipos de desplazamiento, cambiar a rotar o variar la potencia del motor entre suave o alta, tal que podemos escoger entre precisión o rapidez según sea el caso. Esto se complementa con otro sistema de desplazamiento en la parte trasera enfocado al "docking", es decir, el acoplamiento de nuestra nave con lo que llegue a ser necesario.

Hay alguna ocasión en que debemos usar el sistema de vuelo para alcanzar una orbita especifica, una maniobra que resulta sencilla al dominarla, pero que tuve que intentar varias veces hasta tener éxito. Y si no lo hacía bien, retornaba al último punto de control para reintentarla.

Tendremos momentos en que se hace imprescindible realizarlo todo bien o nos devuelven una y otra vez, siendo un aspecto que en algunas partes no me ha gustado nada, e incluso me atrevería a tacharlo como mal diseño de juego, debido a que se originan muchos parámetros que nos pueden dar de baja para hacernos regresar a un punto de control entre 6 y 8 minutos atrás (hablo de una parte concreta), y era tan fácil morir que acabé repitiéndola por lo menos unas 12 veces. Al igual que dos partes del juego en que, por alguna especie de bug, la nave no reaccionaba como debía y terminaba repitiendo una y otra vez, en particular un momento en que debía esperar cuatro minutos y medio hasta llegar a una órbita específica y realizar una maniobra, siendo un tiempo en que no se hacía nada más y en que si fallaba dicha maniobra... ¡regresaba para esperar nuevamente más de 4 minutos! Intentándola unas 15 veces hasta desesperar.

Tras sospechar que era un bug, cargué la partida desde un par de misiones antes y después, de unos dos intentos, logré realizarlo con facilidad. Aquí el problema no era solo el bug (que también), sino que el último punto de control estuviera ubicado en un punto en que me dicen "Espera cuatro minutos", dejándome flotando a la espera en el espacio una y otra vez. Son cosas que no están bien cuadradas y que arruinan puntualmente la experiencia de juego, puesto que, por lo demás, la progresión de la aventura espacial me ha resultado genial, con unos giros argumentales cuanto menos curiosos y una historia paralela de la carrera espacial que me dejó sorprendido en un par de ocasiones.

Otro aspecto a mejorar son las animaciones de las muertes, que resaltan por su ausencia, estando en un momento oprimiendo botones y de repente aparece una pantalla que nos indica la causa de muerte, como sofocación por falta de oxigeno o por colisión, entre otras, lo que reduce la inmersión en ciertos momentos. Habría quedado bien algún indicativo, como visión nublada por falta de aire o alguna explosión al chocar, sin embargo no hay nada, solo morir, ver esa pantalla de causa de muerte y volver al último punto de control.

Pasado paralelo

A nivel narrativo es interesante, los personajes tienen carisma y el doblaje en inglés es bastante bueno. Eso sí, no tiene voces en español, pero sí subtítulos en inglés que aparecen en partes especificas de la nave, por lo que hay que poder leer considerablemente rápido para no perderse nada, al igual que en todas las pantallas se nos dan instrucciones o pistas sobre cómo proceder, lo que no quita que tengamos que cacharrear botones en algún momento hasta dar con el clavo.

Subtítulos en ingles distribuidos en tres puntos específicos de la nave.

Entiendo que parte de la idea inicial yace en el programa espacial soviético "Intercosmos" que fue abandonado en 1990 en el mundo real, presentando esa interacción entre varias naciones para trabajar juntos en el espacio, cosa que logran transmitir aunque la historia no sea muy extensa, lo que tampoco significa apenas un par de horas de juego, porque al avanzar se va haciendo notable la cantidad de repeticiones que conlleva unas 4 horas sin mayor cantidad de muertes a fácilmente 5 o más, sin contar el tutorial. Yo gasté considerablemente más tiempo por los errores ya mencionados.

Además, si nos sentimos osados podemos jugar nuevamente en dificultad alta (solo hay normal y difícil), perdiendo asistencias de la nave y ganando efectos de inercia, al igual que una cantidad de fallos mucho mayor que debemos solucionar para seguir vivos.

Si lo comparamos con su predecesor ("Interkosmos" a secas) notamos el crecimiento de mecánicas e historia, el cual sigue valiendo la pena probar aunque dure apenas entre 30 minutos y una hora, que daba más un aspecto de aplicación experimental que se recubrió de una crisálida durante 5 años para dar vuelo orbital a una mariposa espacial, aunque con sus inconvenientes ya mencionados.

Gráficos y físicas

La nave está bien detallada en su interior y los modelos de los objetos que nos encontremos en el medio interestelar también tienen buen aspecto, que al combinarse con la alta velocidad que necesitamos para mantenernos en orbita hace que tengamos constantes cambios entre luz y sombra, pues ya sabes, eso de orbitar la Tierra 16 veces en 24 horas altera un poco la cantidad de atardeceres que vemos, sin llegar al punto del principito. De forma que la luz también cambia de dirección al interior de la nave y da lugar a que, en algunos momentos, debamos realizar maniobras en bajas condiciones de iluminación, a menos que esperemos unos minutos a volver a estar de cara al Sol.

Por otra parte, el planeta Tierra junto con la esfera celeste son las más afectadas por el bajón gráfico respecto de la precuela (que solo estaba para PC VR), llevando a que poco maraville a la vista.

En cuanto a las físicas, me han gustado en general: si nos descuidamos, los objetos se quedaran vagando por la nave a menos que coincidan con alguno de los adhesivos esparcidos por la recamara o que los dejemos allí por iniciativa propia. Las colisiones están muy presentes, incluso quizás demasiado, pues es común que alguna mano se quede atascada al cambiar de módulo o en ciertos movimientos. Entre lo mejorable resalto que no siempre los objetos se pueden agarrar fácilmente, o por lo menos no a la primera, incluso las palancas, y que las posiciones predeterminadas de las manos pueden dar la sensación de que nos hemos roto salvajemente una muñeca, aunque no hay brazos, solo manos que, por cierto, llevan indicadores de la presión y estado del aire.

Conclusión

Interkosmos 2000 logra ponernos en la piel de un astronauta de la vieja escuela, siendo una experiencia para jugar sentados dentro de una pequeña cabina que nos mantendrá en movimiento y tensión creciente. Su diseño de juego es divertido y la historia interesante, sobre todo si te van estas cosas del espacio. En realidad se llevaría una nota más alta de no ser por los fallos mencionados y partes puntuales que pasan de lo divertido a lo frustrante, pero si quieres viajar al espacio y vivir los peligros a los que un frágil humano en una pequeña carcasa metálica se enfrenta allá afuera, ¡Te invito a que te enlistes, entrenes y cambies el futuro de la humanidad! До свидания ровиано.

El juego ha sido analizado con Quest 2.