Resumen de la presentación de Oculus Rift

Oculus Rift llegará, tal y como anunciaron hace algunas semanas, durante el primer trimestre de 2016. El producto final es mucho más ligero que los kits de desarrollo actuales e incluye ajustes de distancia interpupilar, algo muy demandado desde el lanzamiento del DK1. 

En la parte inferior derecha disponemos de una pequeña palanca que permite modificar la separación de las lentes para acomodarse a distintas distancias interpupilares.

Lo que sí parece claro, aunque no se ha mencionado en la presentación, es que el Rift carecerá de ajustes de enfoque, por lo que aquellas personas con problemas de visión deberán utilizar gafas o lentillas para obtener una visión nítida. Según Oculus, la versión comercial del Rift es mucho más amigable que sus predecesores con las gafas, y habrá que ver hasta qué punto perdemos ángulo de visión o podemos sufrir rozaduras entre las lentes del Rift y nuestras gafas.

El sistema de control incluido con Oculus Rift es un mando inalámbrico de Xbox One, fruto de la alianza entre Oculus y Microsoft. El propio Phil Spencer subió al escenario para anunciar también una compatibilidad total con Windows 10 y la posibilidad de realizar streaming desde la consola hasta el Rift para jugar en una habitación virtual.

Oculus Home, la plataforma de software de Oculus que debutó con Gear VR, llegará también al Rift, convirtiéndose en su portal oficial para descargar y lanzar juegos, demos y estar en contacto con otros usuarios del Rift, aunque no revelarán más detalles al respecto hasta el evento Connect 2 en septiembre.

La cámara presentada con el prototipo Crystal Cove y que nos viene acompañando desde el DK2 hasta Crescent Bay desaparece para deja su sitio a Constellation, un sensor infrarrojo con un ángulo de seguimiento mucho mayor que permitirá experiencias de pie y sentados. Dispondrá de una peana desmontable y también podremos atornillarlo en paredes o colocarlo donde mejor nos funcione. Oculus soporta varios sensores Constellation, lo que posibilita ampliar el espacio de seguimiento.

El Rift incluye un par de auriculares sobre los que Oculus ha comentado una y otra vez que son de una extraordinaria calidad y que están especialmente optimizados para el motor de audio de Oculus, pero también serán desmontables por si preferimos utilizar los nuestros.

Por último, Palmer Luckey mostró un sistema de control más avanzado denominado Oculus Touch, que se venderá por separado e incorpora un stick analógico, un gatillo y diversos botones de acción en cada mando y que también será capaz de detectar los gestos de nuestros dedos gracias a unos sensores internos. Oculus Touch se podrá precomprar a la vez que el propio Rift, aunque llegará unos meses más tarde.

En cuanto al software, se presentaron algunos títulos nuevos como Chronos y Edge of Nowhere, aunque habrá otros como Damaged Core, VR Sports Challenge, Esper y AirMech VR que podremos ver en el E3 la semana que viene. También hay que destacar que Oculus invertirá 10 millones de dólares en desarrolladores que hagan juegos para el Rift.