Probamos Roller Blaster VR en la Paris Games Week 2015 Enviado por la comunidad
5 NOV 2015 10:45
Durante nuestra visita a París probamos en exclusiva la montaña rusa del grupo Partouche VR, con Oculus Rift DK2 y un efectivo sistema de movimiento y ventilación que otorga una gran sensación de velocidad.
La realidad virtual atrae a cualquiera y no deja indiferente a nadie. Así lo ha visto el grupo Partouche, una empresa dedicada a los casinos en Francia. En París hemos tenido la oportunidad de conversar con Julien Van De Rosieren (jefe del proyecto) y Maurice Shulmann (jefe de marketing), quienes nos comentaban como han visto crecer el interés por la realidad virtual en los dos últimos años, por lo cual han decidido combinar el mundo de los casinos con la realidad virtual para atraer a sus clientes.
Y lo hacen presentando Roller Blaster VR una experiencia muy divertida en la que nos montamos en el vagón de una montaña rusa, a la que sumamos un casco de realidad virtual, un Oculus Rift DK2, dando como resultado una muy buena inmersión y un chute de adrenalina. Partouche VR tiene la intención de seguir creando experiencias y se plantean incluso desarrollar juegos en un futuro.
Como podéis ver, en el vagón se pueden subir hasta cuatro personas a la vez. Te colocan unos cinturones de medida de seguridad, para que nadie se pueda levantar a mitad de la atracción. Tenemos posicionamiento absoluto gracias a las cámaras del DK2 instaladas en los laterales. La demo, desarrollada en Unity, no es lo más espectacular del mundo a nivel gráfico, pero sumando el movimiento de la cabina y sobre todo los dos grandes ventiladores que hay enfrente, dan una sensación de velocidad simplemente genial, pocas veces hemos tenido la impresión de ir a tan rápido como aquí. Los ventiladores están muy bien coordinados, dando un flujo perfecto en cada momento. Si nos tuviéramos que quedar con algo, haríamos de nuevo hincapié en los ventiladores. Ojalá los desarrolladores inviertan en esto, es algo que ya existe y no ha tenido mucho protagonismo, pero incluso unos pequeños en nuestro escritorio cuando juguemos con nuestro HMD nos proporcionarán un punto de realismo muy bueno.
Durante la experiencia, podemos mirar a la persona que llevamos al lado, con su correspondiente avatar. Transcurrida una parte inicial de montaña rusa más clásica, nos tele-trasportamos al espacio en nuestro vagón y podemos disparar a enemigos con la mirada. Añadir que la experiencia no marea nada en absoluto gracias al movimiento de la cabina, salvo si alguien se marea en una real, lógicamente. Aquí podéis ver nuestra prueba durante la Paris Games Week 2015:
Dzbelio
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#1 5 NOV 2015 11:11
Que artilugio más chulo eh?? Debe de molar un montón.
Laugt
#2 5 NOV 2015 11:31
Que guay poder ir a las ferias de videojuegos y poder probar estas cosas de primera mano, estoy deseando poder ir a una.
AlfOtto
#3 5 NOV 2015 11:46
Esperaba mucha más inclinación, la verdad, en el reportaje no llegáis a decir si la montaña rusa tiene loops o no, pero dudo que ese grado de movimiento de la cabina lo permita.
Pdaxon
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#4 5 NOV 2015 12:23
Tiene poca inclinación y no hay loops, pero el resultado es bastante sorprendente, no esperábamos que fuera tan efectivo. Solo tenéis que ver la cara de nuestra compañera Elena xD
Porculio
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#5 5 NOV 2015 12:23
Ni fu ni fa, la verdad.
carloscasas
#6 5 NOV 2015 13:04
Una pregunta
¿Las 4 oculus que había estaban cada una con un ordenador diferente sincronizados a la vez?
Frost
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#7 » Respuesta a carloscasas #6 5 NOV 2015 13:15
Estaba pensando lo mismo
Lain Iwakura
#8 5 NOV 2015 16:24
yo tambien lo hacia
Anónimo
#9 5 NOV 2015 17:30
Algo así había en los San Fermines de Pamplona hace ya 20 años. Era una nave espacial cerrada que se movía mientras veías un vídeo en 3D en el que ibas en una vagoneta de una mina a toda leche. También era para varias personas.
Pdaxon
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#10 » Respuesta a carloscasas #6 5 NOV 2015 17:48
Si, cada oculus con su equipo, y la segunda parte de la experiencia en la que disparas se supone que es multiplayer. Pero vamos la demo ya digo que no es nada del otro mundo, pero el cacharro se mueve bien y al sumarle el aire os digo que sorprende. Puede parecer la típica atracción de feria que hemos montado de pequeños, pero con los dk2 no tiene nada que ver.