The Twilight Zone VR: ANÁLISIS

The Twilight Zone está de vuelta

La serie de televisión "The Twilight Zone" o "La Dimensión Desconocida" (en su traducción al español) es una serie de ciencia ficción que marcó las décadas de los 60, 80, 2000 e incluso más recientemente durante el año 2019. Cosechó un gran éxito y recibió premios tan relevantes como 3 Emmy y varios premios Hugo. La franquicia no se conformó con la serie, sino que dio el salto a otros formatos como la gran pantalla, la radio, cómics, revistas y todo tipo de objetos de merchandising. En la serie se utilizaba la ciencia ficción como metáfora para abordar situaciones sociales de actualidad. Ahora nos llega una adaptación a videojuego basada en el universo que se ha creado alrededor de la obra y sigue manteniendo la misma finalidad que su producto principal: una crítica a la sociedad. 

En The Twilight Zone podremos vivir en primera persona tres historias diferentes que narran tres críticas de diferente tipología:

- Historia 1. Character Building: en este primer capítulo encarnaremos al director de un videojuego. Se critica el crunch y maltrato a los trabajadores en la industria del videojuego y se crucifica a este director (que somos nosotros mismos) por sus malas prácticas contra los empleados. Uno de nuestros trabajadores decide vengarse y nos veremos inmersos en un mundo de ciencia ficción en el que seremos el protagonista del videojuego que hemos creado. Y no se trata precisamente de un Animal Crossing, sino que tendremos que sobrevivir en una especia de survival horror en el que un enemigo nos acechará de forma constante. Es el precio a pagar por ser unos explotadores de libro.

- Historia 2. Terror Firma: después de un apocalipsis medioambiental, nos pondremos en la piel de un superviviente que debe hacer frente a unos fantasmas muy misteriosos que se cruzan en nuestro camino. Mientras tanto, nuestro objetivo será buscar entre las ruinas de ese maltrecho mundo en el que nos ha tocado vivir para tratar de encontrar un motivo para seguir viviendo.

- Historia 3. Deadline Earth: seremos un escritor de ciencia ficción que sin comerlo ni beberlo se da cuenta de que es rehén dentro de su propio cuerpo. Y es que se encuentra recluido dentro de una nave alienígena. 

Tres historias realmente inmersivas que nos harán meternos en el papel de ese protagonista que vive en un mundo distópico o inesperado y que necesita salir de allí. La trama de los tres niveles es muy creíble e introduce un toque de humor e ironía que le sienta genial al acabado final. 

Mecánicas para todos los gustos

Nada más empezar en The Twilight Zone nos damos cuenta de que estamos ante una propuesta diferente. Y es que el juego no nos deja acceder al menú a la primera de cambio y nos plantea un reto desde antes del inicio de la aventura. Podremos seleccionar a qué capítulo queremos jugar desde el menú, y las opciones de configuración del juego están muy bien trabajadas. Se puede regular el ángulo y la suavidad del giro para hacer nuestra partida más confortable, así como asignar la orientación del desplazamiento a los controladores o al visor. El juego no incluye la opción de movimiento por teletransporte.

The Twilight Zone cuenta con diferentes mecánicas dependiendo del nivel al que estemos jugando y algunas nos han parecido mejor implementadas que otras. Por ejemplo, el nivel ‘Character Building’ abusa de una repetición de mecánicas consistentes en correr, agacharse para esconderse y volver a correr. Pensamos que se ha desaprovechado toda la parte de gameplay en pos de una buena ambientación e historia interesante. Cada nivel tiene una duración de entre una y dos horas (dependiendo de nuestra habilidad y de las veces que consigan eliminarnos), pero este primer nivel se nos llegó a hacer pesado debido a esa repetición de estructuras jugables. Al final la experiencia se limitaba a esconderse y correr y llegó un punto en el que pudo hasta llegar a hacerse aburrido (queríamos pasar a la siguiente historia). Sin embargo, en las otras dos propuestas, que incluyen una parte shooter y una ambientación con algo más de iluminación, sí que hemos podido disfrutar y meternos más en el papel de los protagonistas de cada historia. La primera propuesta estaba planteada para dar miedo (o al menos eso pretendía) pero a nosotros no nos llegó a transmitir eso. Quizá sí una sensación de urgencia por escapar, pero en ningún momento temor. 

No obstante, el combate con armas de fuego sigue sin ser de lo mejor que hemos visto en RV y presenta mucho margen de mejora. Entendemos que no se haya querido profundizar en las mecánicas, pero nos da la sensación de que se ha utilizado una franquicia de éxito para sacar un título que no está a la altura a nivel jugable. Apuntar se hace muy complicado y prácticamente ningún arma cuenta con miras, lo que dificulta el acierto frente a las hordas de enemigos que se nos presentan. También se hace muy difícil intuir si hemos acertado un disparo o no, ya que las animaciones de los enemigos no ofrecen muchas pistas y no nos ayudan en nuestro viaje por "La Dimensión Desconocida". De hecho, sus apariciones son repentinas y no van acorde al desarrollo del juego y desaparecen una vez les das muerte, por lo que se pierde el realismo deseado.

The Twilight Zone cuenta con una duración de entre 4 y 6 horas (dependiendo de las veces que consigan matarnos) y cuenta con 3 episodios de temáticas totalmente diferenciadas. Su historia y ambientación no consiguen superar tampoco una jugabilidad bastante mejorable. 

Un apartado visual colorido y una banda sonora que sí da la nota

The Twilight Zone destaca por el uso del color y por crear una excelente ambientación gracias a los elementos que incluye en pantalla. Su paleta de colores te puede trasladar de una localización a otra totalmente diferente sin pestañear. Caso aparte ya es su apartado gráfico, que dista mucho de lo visto en otros juegos de Quest 2 como el reciente Green Hell o incluso Resident Evil 4. Y no nos olvidemos de lo que llegará próximamente a Quest 2 y que luce unos gráficos espectacularmente detallados: Red Matter 2.

Esta triple aventura se queda un paso atrás, y no consigue alcanzar el mínimo para destacar. También tenemos que comentar que durante nuestra partida hemos registrado varias paradas del juego, mostrándose una pantalla en negro y teniendo que cerrar y volver a abrir la aplicación para poder continuar. Por suerte, el juego cuenta con autoguardado, pero nos ha sucedido en varias ocasiones y ha sido un punto que ha conseguido sacarnos de la experiencia mientras estábamos de lleno viviendo sus historias. 

Su apartado sonoro sí que está a la altura de la propuesta y ofrece una banda sonora que acompaña a la perfección a cada historia y es el hilo musical perfecto para esta "Dimensión Desconocida" en la que nos ha tocado vivir. El doblaje al inglés es impecable y los efectos de sonido van acorde a cada narrativa. Sin embargo (y una vez más) es un videojuego que nos llega únicamente en inglés y que se olvida de su traducción y doblaje al castellano. Es un esfuerzo que sí puede realizarse (como ya nos ha enseñado por ejemplo el reciente Moss: Libro II) pero por el que muy pocas compañías apuestan.

Conclusión

Estamos ante una propuesta desaprovechada que nos ha dejado un sabor de boca agridulce. Dulce por su inmersiva narrativa y por su increíble ambientación y banda sonora. Agrio porque plantea una propuesta jugable y un apartado gráfico que no están a la altura de la franquicia que han adaptado ni de cualquier videojuego notable de Quest 2. Su mezcla de mecánicas no ha servido para plantear todas ellas de forma satisfactoria y nos quedamos con la sensación de que el experimento podría haber salido mejor.

El juego ha sido analizado en Quest 2.