Suicide Guy VR Deluxe: mini-ANÁLISIS

Nada nuevo bajo el Sol

Hemos jugado con él en diferentes visores y ahora, por sorpresa, aparece en PSVR2 como Suicide Guy VR Deluxe, la versión definitiva de este curioso juego de puzles y plataformas. Las reglas no han cambiado desde que lo analizamos hace unos años, por lo que toca comprobar si todos esos molestos bugs que ofrecía y las ventajas que ofrece la nueva realidad virtual de Sony han servido para que el juego de Chubby Pixel haya renacido con más fuerza que nunca.

Pero desgraciadamente no es así. Al menos en parte, porque es cierto que no hemos sufrido ciertos errores del pasado, pero sí revivido una interacción con objetos y entornos demasiado tosca, algo que obviamente no está a la altura de lo que deberíamos esperar a estas alturas de la película. Cogemos objetos con las manos aunque visualmente no sea así, las físicas están creadas específicamente para que sus rompecabezas funcionen y los saltos, siempre al límite de las plataformas, son cuanto menos cuestionables.

Un cúmulo de pequeños detalles que lo convierten en un producto menos inmersivo de lo que debería ser, incluso a la hora de utilizar sus propios recursos. Disparar un tirachinas se hace con un simple botón en lugar de una acción gestual, al subir escaleras no importa dónde nos agarramos... Y así un sinfín de licencias que Suicide Guy VR Deluxe se permite para ofrecer una experiencia de juego ligera y sin complicaciones. Así que no os extrañéis si una roca de nuestro tamaño está sobre un interruptor gigante que no activa, pero si la apartamos y nos subimos nosotros sobre él ya funciona.

Aunque a nivel de contenido no se ofrecen novedades, sí que intenta sacar partido de la vibración de los mandos o incluso del propio visor. Pero no siempre es así, generando un feeling algo irregular cuando una acción básica se acompaña de un tembleque, pero al utilizar un destornillador eléctrico gigante no tenemos respuesta. En cualquier caso, si en algo mejora respecto a PSVR es en un movimiento mucho más preciso gracias al uso de los sticks, haciendo que sus secciones plataformeras no sean un infierno y apuntar o arrastrar objetos sea algo mucho más fácil, aunque no necesariamente natural.

Los objetos se "cogen" igual pero de forma más nítida.

Conclusión

Suicide Guy VR Deluxe es un título simpático, con muchos homenajes a grandes sagas de la industria, pero que más allá del morbo que supone buscar la forma de suicidarnos constantemente, no hay nada remarcable en su par de horas de juego que nos motiven especialmente a rejugarlo. Algunas opciones de confort más no le sentarían mal (como la viñeta), y la traducción de los textos al español también necesitarían una revisión (ese back traducido como espalda), lo que demuestra la labor de pulido que ofrece, de nuevo, la aventura de Chubby Pixel. Se ve y se juega mejor, pero sigue siendo el mismo juego de hace unos años atrás y lo que ello supone a las puertas de 2024.

Mini análisis realizado en PlayStation 5 con PSVR2 sobre la versión del juego 1.000.000