Rigs - PlayStation VR: ANÁLISIS

Adaptación VR

No se puede negar que uno de los géneros más exitosos hoy en día es el de los first person shooters o fps, sobre todo en su vertiente multijugador. Desde que Playstation VR se anunciase, muchos se preguntaban cuál sería la forma correcta de adaptar dicho género a esta nueva tecnología, ya que se trata de una experiencia frenética y con una gran dosis de acción, y hay que tener muy en cuenta el tema de los mareos si te propones lanzar un juego de este corte para realidad virtual. Los sistemas de locomoción habituales de los videojuegos tienden a producir malestar a un gran número de jugadores cuando son aplicados a la realidad virtual, pero no es algo que puedas desechar fácilmente.

Esto es algo que, sin duda, han tenido que pensar mucho en Guerrilla a la hora de definir Rigs, pero desde luego han dado con una de las mejores soluciones a día de hoy, que es situar al jugador dentro de una cabina, en este caso de una cabina de unos robots gigantes de combate llamados Rigs. De esta forma, el jugador siempre tiene un punto de referencia visual, lo que minimiza en gran medida los mareos en escenas de acción y mucho movimiento, amén de aumentar la inmersión, ya que como sabemos, las cabinas de pilotaje se llevan muy bien con la realidad virtual.

Pero no solo este aspecto se ha tenido en cuenta a la hora de maximizar el confort de los jugadores: Guerrilla ha incluido además distintos modos de control, como el hecho de poder rotar nuestro Rig con el joystick derecho, de tal forma que con nuestra vista podamos apuntar y contemplar nuestra cabina, o por el contrario podemos utilizar nuestra mirada para apuntar y rotar nuestro Rig (e incluso configurar una zona muerta para la rotación con la vista). Además de esto, el juego también nos permite "censurar" escenas más trepidantes, como el hecho de salir despedidos de nuestra cabina, algo en nuestra opinión digno de ver y que bien se podría comparar con una atracción.

Todos estos puntos minimizan casi por completo los mareos, pero siempre dependerá de la sensibilidad de cada persona, ya que aunque la mecánica está bien diseñada, sí que es cierto que se trata de una experiencia trepidante y fuerte, y la velocidad, los golpes, saltos a grandes alturas o las eyecciones de cabina (si no las hemos censurado) son experiencias que pueden hacer sentir aceleraciones inexistentes, y que aunque para algunos (como un servidor) puede ser una experiencia divertida, los más sensibles pueden necesitar un periodo de adaptación.

En cuanto a la jugabilidad propiamente dicha, el control se realiza íntegramente con el Dualshock 4, de manera muy similar a cualquier first person shooter, con la peculiaridad del apuntado con la vista, que funciona perfectamente.

Para finalizar, comentar que todos los menús están recreados a modo de "oficina" para gestionar nuestros patrocinadores, equipo, partidos y como no nuestro Rig activo. Además, los resultados de los partidos los veremos a modo de holograma desde nuestro asiento en el jet privado del equipo. Todo esto completa una adaptación a realidad virtual bastante bien cerrada, sin ningún error mayor que hayamos podido detectar, dejando claro que el título ha sido pensado expresamente para la realidad virtual.