Soundself: ANÁLISIS
29 ABR 2020 13:00
Relajación, desconexión sensorial, estados de la consciencia alterados, meditación trascendental, hipnosis, oración y realidad virtual. Soundself nos da la bienvenida al mundo de la tecnodelia, fusión de tecnología, mística y psicodelia. Disponible para Rift y SteamVR.
Viaje astral, alucinación virtual
En los años 50, para describir el efecto de algunas drogas (especialmente los del LSD creado la década anterior) se inventó el término psicodélico, que viene a significar algo parecido a "la manifestación de nuestro yo más profundo". De los laboratorios químicos y de los despachos de psiquiatría la palabra saltó a la cultura hippy y desde los años 60 se utiliza también para definir un tipo de música y de experiencias audiovisuales caracterizadas por la experimentación, el uso de sonidos exóticos, sonidos repetitivos, imágenes distorsionadas, colores ácidos y formas geométricas o abstractas.
La teoría detrás de todo esto es que, si conseguimos olvidarnos del mundo al que nos conectan nuestros sentidos habituales, seremos capaces de llegar al fondo de nuestra alma. Y aquí está la clave a la hora de acercarnos a una experiencia como Soundself: creer en ella y confiar en que nos dé lo que promete.
La suspensión de la incredulidad
Estamos ante una experiencia pura y dura cuyo objetivo es que el usuario se relaje, se deje llevar, se olvide de los problemas del día a día. Soundself es el guía virtual de una sesión de relajación clásica con un envoltorio de realidad virtual. Se puede jugar sin visor, pero en este análisis nos centraremos en la experiencia con un HTC Vive/Oculus Quest + Link.
Iniciamos el programa y nos encontramos con un aviso para que nos mantengamos alejados de esta experiencia si sufrimos epilepsia, migrañas, sensibilidad a luces y colores, ansiedad u otras dolencias. También aconsejan no conducir vehículos ni manejar maquinaria justo después de haber acabado una sesión. Así mismo, se nos recomienda usar auriculares, porque el sonido es un componente esencial de la experiencia, y prepararnos buscando una postura cómoda sentados o ligeramente reclinados. Es bastante habitual que en una sesión de relajación nos tengamos que tumbar de espaldas en el suelo, y podríamos hacerlo en este caso, pero esta aplicación es casi mejor usarla bien acomodados en una silla o sofá. De igual forma, se recomienda estar descalzos y llevar ropa cómoda. Lo de prender una barrita de incienso ya es cosa de cada uno, ya que encender una velas para lograr una iluminación agradable es poco práctico con el visor puesto.
Nos podemos olvidar también de los mandos, las pocas opciones que hay en el menú se escogen mirándolas fijamente durante unos segundos. Lo que es imprescindible es tener activado un micrófono, ya que el sonido de nuestra voz es la forma de movernos cuando comience nuestro viaje espiritual.
Opciones e idiomas
El menú no es exactamente igual que el que veis en la fotografía, puesto que ha sufrido leves modificaciones. Para empezar, aquí lo veis en inglés cuando está perfectamente traducido al español y ocho idiomas más (italiano, portugués, chino, alemán, holandés, ruso, sueco y francés). También han cambiado la duración de las sesiones, siendo ahora de 15, 20, 30 o 40 minutos, y para los más valientes una opción identificada con el símbolo hindú del Om, la sílaba sagrada.
Si escogemos el castellano, será la voz de Sofía la que nos guíe por el proceso de meditación, pero cada idioma tiene un guía diferente. La voces son agradables en todos los casos, y femeninas a excepción del guía italiano, Fabio, y de la voz en chino mandarín.
El que Soundself esté en castellano se agradece, pero debo señalar que Sofía tiene un fuerte acento extranjero (las haches las pronuncia aspiradas, como una jota suave). Podemos verlo como un defecto o simplemente considerar que nuestra guía tiene una voz exótica. De cualquier modo, esta voz solamente está presente al comienzo de la experiencia dándonos indicaciones de cómo respirar y cómo tonificar (entonar) nuestra voz.
Ohmmm, Omhhhh, Ommmm
Nuestro viaje al interior del yo comienza bajo un árbol y un cielo nocturno estrellado. La sosegada voz de Sofía nos enseñará a hacer respiraciones profundas: inspirar, mantener, expirar. O cómo ella dice, "iiinJalar", "esssJalar". Al soltar el aire, debemos emitir un tono con nuestra voz (Ommmm) de 4 segundos al principio, de 6 a continuación, más largos después, descansando de vez en cuando. De la duración de esa vocalización dependerá la velocidad de avance por la experiencia. Poco a poco nos elevaremos desde el suelo hacia el cielo atravesando las ramas del árbol hasta llegar a una espiral, y a partir de ese momento da inicio el viaje psicodélico por una galaxia de colores y figuras geométricas cambiantes, hipnóticas, de sonidos y música relajante con ecos de nuestra voz distorsionada.
Somos lo que jugamos
A partir de este punto, la experiencia es completamente personal. Habrá quien consiga relajarse, encontrarse con su yo más profundo y viajar al interior de su consciencia. Otros serán incapaces de tomarse en serio todo esto o simplemente no conectarán. La cuestión es si la realidad virtual aporta algo o no al proceso de meditación, y más específicamente, si lo hace Soundself.
Mi respuesta sería un no con matices y con una advertencia: yo no soy un experto en estas técnicas de relajación, y aunque las he practicado en cursos de gestión de estrés o clases de danza libre contemporánea (no todo son videojuegos en mi vida) siempre me ha costado mucho entrar en ellas, dejar la mente en blanco, desconectar de mi entorno y enfocarme en la respiración, en oír los latidos de mi corazón o en escuchar la música de mi mente, del alma o de las esferas celestiales. No soy un completo escéptico y reconozco el valor de este tipo de prácticas, pero personalmente me cuesta abrir esas "puertas de la percepción" sobre las que escribía Aldoux Husley sin recurrir a algo más que respirar, relajar los músculos y escuchar música suave.
La realidad virtual puede aportar aislamiento (encerrando nuestra mente/cerebro en el visor), sonidos y entornos que nos ayuden a desconectar de las 4 paredes de nuestra habitación. Pero de todos los títulos que he probado, casi ninguno sacaría buena nota, y Soundself no es la excepción. Veamos algunos ejemplos:
- Remind VR, de Vive Studios, se vende como una experiencia trascendental de meditación, cuando lo que ofrece son 3 escenarios con gráficos correctos como mucho y una experiencia que en lugar de relajación consigue exasperar al usuario. Permanecer minuto y medio encerrado en un ascensor, llegar a lo alto de un rascacielos y lanzar desde allí aviones de papel es aburrido. Permanecer una eternidad mirando una vela, tocar un gong y aparecer en un paisaje japonés nevado no es la bomba. Y para estar en mitad de la nada mirando la evolución de unas nubes mientras te hablan en inglés, mejor me asomo a la ventana de mi habitación.
- Perfect, de nDreams, se anuncia como una escapada en realidad virtual a paisajes tan maravillosos como una soleada playa o un lago iluminado por auroras boreales. Gráficamente los escenarios no están mal, son dignos de ver, especialmente por la noche. Sin embargo, aparte de tirar piedras al mar o un lago, poco más se puede hacer, así que la experiencia se vuelve más tediosa que relajante.
- Satori Sounds VR, de ZCat Systems, promete también entornos inmersivos y una tecnología de audio que estimulará nuestras ondas cerebrales. Lo que uno se encuentra son vídeos en 360º con mala calidad y una musiquilla de fondo.
- Nature Treks, de Greenergames, es mucho mejor que las anteriores y la única que recomendaría. Diferentes paisajes que se pueden recorrer con teletransporte, buenos gráficos, música agradable y varias formas de interactuar con el entorno: plantar flores, colocar piedras, hacer que llueva o que vuelen mariposas, etc.
Algo nada espiritual: el ratio calidad/precio
Todos los anteriores títulos, y muchos otros, tienen precios moderados. Experiencias gratuitas en VR que jueguen con luces, colores, formas geométrica, música y sonidos hay docenas (Fantasynth: chez nous Polydome, etc). Por tanto, ¿qué aporta Soundself para costar el doble o el triple que otros títulos? ¿Estamos ante la experiencia de meditación VR definitiva, un tripe A del género?
Por desgracia no es así. La teoría que hay detrás de este título se queda casi en mera palabrería por culpa de una ejecución pobre, muy pobre en el apartado visual. Y es una lástima. Han invertido esfuerzo en que esta aplicación esté en nueve idiomas, que tengamos que usar nuestra voz para profundizar en la meditación funciona y la parte sonora es inmersiva. Pero gráficamente el producto tira para atrás. La sensación de viaje dura un par de minutos, una vez que desde el suelo nos elevamos hacia el universo, la sucesión de formas geométricas y colores es muchas veces más plana que tridimensional y la resolución parece escasa. Empezaron el desarrollo de este título en 2013, y da la sensación de que se quedaron en esa época o incluso en alguna anterior. Y ya puestos a quedarse anclados en el tiempo, pues mejor haber retrocedido a los '70 y haberse inspirado en su estética.
Por tanto, la experiencia de usar Soundself en VR no aporta mucho más que hacerlo en versión escritorio. De hecho, el ponernos el visor lo que añade es incomodidad, algo que no es culpa del software de Andromeda Entertainment, sino del hardware: el peso de nuestro casco, sentir su presión sobre nuestra cara, notar quizá el cable, el FOV, el glare y todos esos defectos que, en mayor o menor medida, todo visor VR sufre.
CONCLUSIÓN
Aunque como experiencia tenga un punto de partida interesante y puede que este título pueda servir como método casero de relajación, no puedo sino sentirme decepcionado con este programa. Además, habiendo probado otros títulos con objetivos similares, creo poder afirmar que el camino para conseguir experiencias relajantes en realidad virtual no es imitar las técnicas clásicas de meditación. Juegos como Fujii, por poner un ejemplo, consiguen mejores resultados.
La aplicación ha sido analizada con HTC Vive y Oculus Quest (Link).
kiketron
Visores
#1 29 ABR 2020 20:03
Malo, malo. Una pena. Puede que la VR necesite mejor hardware xa algo así quizá cuando la nitidez y visionado se sienta natural, la comodidad se sienta como no llevar nada...que coño el programa es malo y punto.
mario_medi
#2 7 MAY 2020 13:53
Me lo compré para darle una oportunidad ya que este tipo de apps de meditación me llaman mucho la atención, pero me pareció un poco repetitivo incluso cansado el apartado visual tras la primera sesión, y la voz de Sofía... Hay muy buenos interlocutores en castellano como el canal de Youtube de Desencarna2.0
Realmente no vale el precio que cuesta, y apostaría por si hicieran un port a Quest, pero me parece que si llevan desde 2013 en desarrollo poco va a cambiar.
Habrá que esperar a que salgan visores de RV más cómodos para que este tipo de experiencias sean mucho más inmersivas y consigan hacer un desdoblamiento del alma.