Puzzling Places: ANÁLISIS

Un mundo distribuido en miles de partes

A continuación tenemos el análisis completo enfocado en la versión de Quest, y luego tenemos un anexo sobre la versión de PSVR.

El reto mental nos llega de la mano del estudio realities.io, por medio de una experiencia de rompecabezas tridimensionales que recrean principalmente paisajes y edificaciones de distintos lugares del mundo, otorgando un juego que puede resultar desde relajante hasta retador.

Un viejo amigo

Probablemente muchos recuerden el recorrido de este título, presentándose por primera vez (por lo menos para mí) en SideQuest como aplicación gratuita que incluía apenas un rompecabezas con una cantidad de piezas fija. Luego nos llegó la noticia de su lanzamiento en App Lab, aún gratuito pero ahora con varios rompecabezas y cada uno de una cantidad diferente de piezas.

Pues bien, ha llegado el momento. Después de estos aperitivos, tenemos el placer de acceder a la versión completa del juego, encontrando que, como sería normal, ya no es gratuito (su precio es de 14,99€), pero os adelanto que es una inversión que vale la pena, con la inclusión de varios escenarios adicionales y diferentes cantidades de piezas a escoger. Ahora sí, veamos qué nos ofrece Puzzling Places.

Conociendo el mundo en 16 rompecabezas

Tal y como menciona, el título nos abre las puertas a 16 figuras tridimensionales diferentes, en su mayoría lugares como edificaciones, ciudades o paisajes, aunque también tenemos la posibilidad de reconstruir interiores y un kimono. Cada modelo 3D cuenta con la posibilidad de distribuirlo entre 25, 50, 100, 200 y 400 piezas, haciendo que el juego pueda pasar de algo muy casual hasta un reto que nos llevará varias horas por resolver.

El sistema de juego es casi tan simple como tomar las piezas con nuestras manos y unirlas, para lo cual disponemos de las piezas flotando de forma organizada frente a nosotros. Miramos qué piezas queremos y las atraemos con cualquiera de los gatillos de nuestros mandos, que al mantenerlos presionados nos permiten manipularlas, o bien podemos dejarlas flotando en cualquier lugar, aunque si nos estorban es suficiente con mover el joystick hacia delante para que vuelva a estar organizada. En principio esto es suficiente para jugar, aunque hay algunas opciones adicionales configurables, como el desplazarnos al pulsar los botones B y Y (muy similar a como se realiza en GORN).

A nivel estratégico tenemos dos mecánicas, la más útil es una especie de "bolsillo flotante" que permite guardar las piezas que queramos de forma organizada y moverlas en bloque, y también nos deja guardar estructuras grandes que ya tengamos ensambladas. La menos relevante y que en realidad no le he encontrado utilidad es un icono de ojo que posibilita ver de qué forma son las piezas que ya hemos usado, haciéndolas transparentes al pasar dicho icono a través de ellas.

Imagen de referencia vs rompecabezas en proceso.

De la relajación al vicio total

Lo mejor de esta experiencia es que no necesita mayor curva de aprendizaje, siendo perfecto para usuarios de cualquier edad. Además podemos decidir si queremos solo pasar el rato o abordar un reto digno de todo amante de los puzles, pues en mi experiencia el escoger 25 piezas puede darnos para unos 10 minutos de juego. Sin embargo, con 400 piezas he tardado entre cuatro horas y media hasta cinco para terminarlo: ahora imagina hacerlo así con los 16 desafíos y sin imágenes de referencia (las cuales se pueden deshabilitar desde la configuración).

Conforme avanzamos en una construcción, el audio se vuelve uno de los detalles agradables del juego, habilitando ciertos sonidos al darle la suficiente forma a estructuras concretas, como lo sería escuchar bolas chocando al armar un mesa de billar, cánticos en una iglesia o personas en una plaza comercial.

Vista cercana

La combinación de todo lo mencionado da un resultado muy bueno, el ambiente es relajante y me ha sido fácil quedarme largo rato uniendo piezas, claro que he llegado a sentir algo de cansancio visual, pues si bien la resolución es lo suficientemente buena, hay ocasiones que exigen buscar detalles que hacen sentir las faltas de texturas, pero en general no se echan en falta mejores gráficos. De todas formas cabe aclarar que, al estar manipulando todo al estilo de un gigante, se ve bien, pero si nos acercamos demasiado a algunos objetos como vehículos o edificios, parecen haber sido aplastados o derretidos (para esto hay que acercarse bastante).

Por último, he de mencionar lo cómodo que resulta de jugar, siendo lo más practico jugar de pie o sentado, pero el jugar acostado también lo he encontrado agradable, y por la forma de manipular los objetos tampoco necesitamos mucho espacio para movernos, haciendo de este un título perfecto para cualquier momento.

Escenario completado satisfactoriamente en modo de 400 piezas.

Conclusión

Puzzling Places nos ofrece una propuesta sencilla y apta para todos los públicos, que logra explotar satisfactoriamente sus mecánicas y concepto en extremo sencillo, siendo a veces estos juegos poco complejos los que mejor le quedan a las experiencias virtuales, logrando un ambiente inmersivo que invita a quedarse varias horas jugando, claro que hay que ser lo suficientemente paciente para los casos de mayor número de piezas. Aún así hay pequeños detalles a mejorar, diría que le hacen falta animaciones a cada puzle al terminarlo, o por lo menos una resolución ligeramente mayor en las texturas, y aún sin esto ya lo encuentro como una gran recomendación, aunque le hace falta algún tipo de progresión, o por lo menos retos que lleven más allá del ser un rompecabezas convencional.

El juego ha sido analizado con Quest 2.

Podemos ver el juego en acción en este gameplay comentado:

Versión PSVR (Dark)

¿Quién no ha pasado estupendas tardes en familia montando puzles? Más allá de ser un simple hobby, se ha convertido a lo largo de los años en toda una afición para mucha gente, competiciones para otros tantos y momentos de relajación y desarrollo personal para muchos más.

La interfaz es muy ligera, dejando la importancia al puzle.

Con esta última idea, sencilla pero magistralmente ejecutada, llega Puzzling Places a PSVR, permitiendo crear una escenario real a partir de piezas de puzle irregulares. Y lo cierto es que funciona de maravilla. Bien sea con uno o dos PS Move, recogemos y giramos las piezas, las hacemos encajar o las descartamos dejándolas flotar en el aire. Esto, que a priori puede parecer un caos organizativo, resulta increíblemente intuitivo gracias a la sensación espacial que produce la realidad virtual y que cobra todavía más importancia cuando vemos que esa tercera dimensión es lo que da vida a las composiciones que tenemos entre manos.

La experiencia es única y terriblemente satisfactoria

Y lo cierto es que los mandos de Sony funcionan muy bien con un título tan relajado y relativamente poco exigente, aunque preciso por momentos. Además, la resolución que presenta es muy buena, teniendo todo el peso gráfico en los propios rompecabezas y cumpliendo con creces en la definición de las texturas, algo que queda patente cuando "nos metemos" dentro de uno de ellos o acercamos la vista para observar los pequeños detalles.

Más allá de esto, como juego, Puzzling Places es cierto que se queda algo cojo al no presentar retos o una progresión real como podríamos esperar. En lugar de esto, el jugador tiene total libertad para seleccionar su puzle favorito, de los 21 disponibles, y el número de piezas necesarias para completarlo. Aquí encontramos varias opciones que van entre las 25 y las 400 piezas, guardando el progreso de forma automática para cada puzle, algo perfecto para que los de mayor tamaño podamos afrontarlos en múltiples, y necesarias, sesiones.

Podemos personalizar el cielo para crear una atmósfera personal.

Con todo, Puzzling Places es un juego que sorprende para bien, uno de esos productos que hacen de la realidad virtual un lugar donde tienen cabida propuestas diferentes y que resultan terriblemente satisfactorias. Quizá echemos en falta una progresión, relegada a la obtención de logros, pero lo que ofrece si eres afín a su propuesta te mantendrá absorto durante horas.

Impresiones tomadas de la versión PSVR en PlayStation 4 Pro.