Análisis del Oculus Rift DK2

6 AGO 2014  8:58

Juanlo

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Nuevas lentes

Mientras que el DK1 incluía tres juegos de lentes, en el DK2 este número se ha reducido a dos. Las antiguas lentes A y B se han fusionado en las nuevas lentes A para vista normal y miopía leve, mientras que se conservan las C para los usuarios con una miopía elevada. Por supuesto, estas nuevas lentes no son intercambiables con las del DK1.

 

La lente del DK2 a la izquierda y la del DK1 a la derecha

La lente del DK2 a la izquierda y la del DK1 a la derecha

 

Tal y como podéis apreciar en la imagen, las lentes del DK2 han sufrido grandes cambios respecto a las del DK1. El diámetro es mayor y la deformación de la imagen es claramente inferior alrededor del centro físico de la lente. El DK2, como su predecesor, tampoco permite ajustar la distancia interpupilar física de las lentes, sin embargo Oculus afirma que éstas ofrecen un mayor rango de tolerancia alrededor del centro, es decir, que aunque no tengamos los ojos alineados con el centro físico, veremos la imagen perfectamente. En la práctica, sin embargo, tenemos una sensación similar al DK1 y, si ese rango de tolerancia es mayor, creemos que ha aumentado muy poco.

 

Desde luego, para la versión comercial del Rift nos gustaría poder ajustar tanto la separación entre las dos lentes como la distancia focal, es decir, la distancia de las lentes a la pantalla. Ello permitiría ajustar el Rift totalmente a la visión de cada usuario, y las personas con miopía podría utilizarlo sin necesidad de gafas, lentillas o cambios de lentes.


El cambio de lentes se realiza igual que en el DK1: basta con realizar un pequeño giro para desenroscar la lente incluida, y el movimiento contrario para asegurar la nueva. Nos da la sensación de que ahora encajan mejor que en el DK1 y notamos claramente cuando la pestaña ha encajado en su sitio. Por cierto, recomendamos encarecidamente realizar el cambio de lentes con el Rift boca abajo, de esta forma minimizaremos la posibilidad de que entre polvo o suciedad en el interior. Dicha suciedad es muy visible al ser amplificada por las lentes, y limpiar el interior hasta dejarlo perfecto puede ser bastante complicado y requiere de muchos intentos, lo decimos por experiencia.