Contractors: ANÁLISIS

Multijugador con un toque de arcade

Preparados para la guerra. Ponte el visor, toma los mandos y comienza la acción, ya estás listo para dar tiros o terminar lleno de balas. Cerca de dos años después de su salida para PC, Caveman Studio nos trae la versión portátil de su popular juego. ¿Habrá sacrificado mucho en el camino, o realizará una entrada triunfal por la puerta grande?

No lleva tiempo adentrarse en el campo de juego. Nada más empezar te encuentras en un campo de tiro que a la vez hace de tutorial, donde aprendes las mecánicas básicas como agarrar el arma, descargar el cargador e intentar recargar mientras exploras las posibilidades que ofrece el chaleco táctico. Como todo buen soldado, vas bien equipado: tienes tres tipos de granadas (humo, aturdidora y la fragmentadora de toda la vida), un cuchillo, una pistola, tres cartuchos del arma principal, dos de la secundaria y el arma principal, una carabina que podrás cambiar a gusto. Esto es totalmente personalizable, y hay un límite de puntos para gastar en equipamiento (ya profundizaré en esto), luego solo es cuestión de ir probando lo que se te ofrece mientras vas dando de baja a siluetas planas en forma de enemigos. Este primer contacto puede no ser completamente intuitivo para todos y carece de explicaciones detalladas, por lo que la prueba y el error serán los principales aliados, teniendo la posibilidad de acceder a los tutoriales desde el menú las veces que sean necesarias.

Superado el soltar nuestras armas por accidente y entendido el sistema de recargas, estaremos listos para nuestra primera partida, para lo que tenemos una interfaz tan directa como sencilla, al punto de pecar en lo descuidado, con un estilo de diseño más propio de juego de monitor que de realidad virtual (podemos mover los menús y variar su cercanía). El acceso al menú se realiza por medio de los botones "B" o "Y", mientras que el botón de menú del mando izquierdo extrañamente no tiene utilidad, a menos que lo habilitemos. Al abrir el menú encontraremos todo de forma plana y con pocos detalles, y a diferencia de su homologo de PC, tendremos dos opciones en lugar de tres: la de configuración y la de gameplay (perdemos la de mods).

En la primera encontraremos tres opciones, perdiendo la cuarta opción de PC (la configuración gráfica), ofreciéndonos la posibilidad de configurar los controles en la primera pestaña, con todo lo que podríamos considerar necesario, comenzando por la posibilidad de calibrar la altura, lo cual puede presentar problemas menores, como un desfase de algunos centímetros el cual en varias ocasiones me dio la sensación de ser más bajo de lo normal al situar el suelo virtual cerca de 10cm por encima del suelo real, pero en general suele funcionar bien. Si quieres jugar sentado, basta con calibrar una altura bastante baja, con la desventaja de que perderás la posibilidad de agacharte, o por lo menos de hacerlo cómodamente, pues solo es posible agacharse de manera física, no hay botón para ello.

Luego tenemos la posibilidad de que nuestro avatar sean solo un par de manos o cuerpo entero. Personalmente considero mejor la primera opción, pues se suele tener la cabeza un poco entre los hombros, por lo que el torso y hombros pueden llegar a incomodar. Lo demás de este apartado consiste en opciones de interacción con el arma, seleccionar con qué mano te desplazas, decidir cuál es la mano dominante, los botones de interacción (índice o anular), la necesidad de mantener presionado para sostener el arma, la posibilidad de asignar el botón de menú al menú del mando izquierdo, y por último el movimiento, en donde se nos permite habilitar el HMD (dirigir el movimiento con la cabeza) y la opción de correr automáticamente. De no escogerla, nuestro personaje esprintará al presionar el stick de movimiento, claro que esto se complementa muy bien con un detalle que ya comentaré sobre las mecánicas. También podemos seleccionar el tipo de giro si queremos rotar con stick y habilitando el giro suave con velocidad variable, o bien girar por saltos de hasta 90º.

Las opciones son muy completas en el apartado anterior, aunque luego tenemos el apartado de presentación en el  que sí se han llevado a cabo más recortes, permitiéndonos habilitar el mostrar en pantalla las muertes que hagamos, los efectos de sangre, el "camera shift", que es un pequeño efecto de retroceso o vibración al disparar, la opción de pulsar el chaleco para activar el walkie talkie o que siempre esté activado, y la posibilidad de personalizar el color de la mira holográfica. Puede que algunos extrañen la inclusión del modo viñeta, el cual sí se permite en la versión de PC, así que alista tus piernas virtuales porque las vas a entrenar, debido a que el juego llega a ser bastante movido y podría generar mareos. Finalmente, tenemos una pestaña de ajustes para jugar con un gunstock (soporte rígido donde colocamos los controladores para emular un arma física de sujeción a dos manos).

Cuenta con 8 modos de juego: dominación, control, competitivo control, desactivación de bomba, TDM, FFA, extracción y baja confirmada, los cuales pueden ser combinados con la opción de armas actuales o de la Segunda Guerra Mundial en un total de 11 mapas, de los cuales hay una variación completa con escenarios de ciudad, campos abiertos y desnivelados, fábricas, un par de mapas con temáticas poco convencionales de objetos gigantes, etc. Lo que no se tienen son los mapas que se pueden descargar en PC, por lo menos mientras no se habilite la posibilidad de incluir mods. En el modo single player encontramos 8 misiones cortas con objetivos variados, que también pueden ser superados en cooperativo online entre cuatro jugadores, y por otra parte el modo de juego libre, en el que irán apareciendo enemigos de dificultad variable, que si bien puede no resultar tan emocionante, por lo menos puede ser un buen lugar para aprender a usar las armas y probarlas sin tanta presión, sumando al reconocimiento de los mapas.

La fortaleza de su jugabilidad se haya en su modo online con juego completamente cruzado entre la versión de Steam y Oculus Rift, gratamente nos encontramos con una comunidad muy activa la mayor parte del día, teniendo varios servidores para escoger, con el plus de que si entras con un amigo o equipo la experiencia puede ser más personal y emocionante. Eso sí, noto la carencia de algún método para encontrar a algún amigo que esté jugando, ya que la única forma es que él mismo sepa en qué servidor está.

Cada partida se torna dinámica y con un estilo arcade bastante marcado, el único momento de descanso puede que sea el tiempo de respawneo, luego sigue la acción hasta que vuelves a caer averiguando desde dónde te dispararon. Llegar a este punto es muy rápido, pues solo toma un par de minutos abrir el juego y llegar a una partida. La única barrera puede llegar a ser el idioma, pues la mayoría de jugadores son angloparlantes y el juego también está completamente en inglés. Sin embargo, con entender los textos de los menús debería ser suficiente, ya que los únicos diálogos son los de los demás jugadores y tampoco es que sean imprescindibles para lograr la victoria. Claro que si quedas con algún grupo que hable español, la experiencia mejora mucho.

En el apartado de armas nos encontramos con un sistema realista y completo, al punto de que si no tienes idea de cómo se recarga un arma real tendrás que explorar la manera de volver a tener una bala en la recamara, pues cada una posee su propia forma de recarga equivalente a la que tendría en la vida real: algunas soltarán el cargador al presionar un botón, y en otras será necesario retirarlo manualmente. Es posible que te encuentres buscando el accionador de amartillar mientras alguien te apunta en la cabeza desde algún lugar lejano (tal vez sea mejor explorar las armas en el single player), y es que el juego nos ofrece un apartado de 30 armas principales y 7 secundarias, lo que nos abre la posibilidad de probar diferentes combinaciones hasta encontrar un estilo propio que nos haga sentir a gusto, por lo menos hasta que entramos en una partida con temática de la segunda guerra mundial y estás restringido a sus armas con mira metálica, restricción que me gusta aunque pueda no ser del agrado de todos.

El título cuenta con un sistema que busca equilibrar la partida, permitiéndonos un número máximo de puntos con los que escoger nuestro equipo, dándonos la posibilidad de sacrificar un arma para conseguir otra que nos gusta más o simplemente añadirle una mira holográfica, por ejemplo, y es que personalizar esto en la sección de loadouts nos llevará un escalón más allá. Otra mecánica que resulta bastante cómoda es el hecho de que la posición del arma nos permite correr o caminar, de manera que al bajarla podremos ir rápido y al apuntar iremos lento, lo que ayuda a la estabilidad de la puntería.

Gráficos, físicas y bugs

Gráficamente nos encontramos con... ¡polígonos y más polígonos! El sacrificio frente a su versión de PC es más que notorio: di adiós a la vegetación, la hierba se irá y algunas hojas se volverán papel tapiz, los vehículos dejan de ser de metal brillante para convertirse en cartón pintado, y lo mismo sucede con las rocas, aunque las texturas de ladrillos y estructuras en general tienen buena pinta. Además, el detalle de las armas es de aceptable tirando a bueno, que considero una de las cosas más cómodas, pues por lo menos lo demás no estará frente a tus ojos todo el tiempo, de manera que después de un tiempo puede que te acostumbres y la inmersión se mantenga, pero en general el paso a la versión portátil generó bastantes recortes y diría que el hardware de Quest 2 no está del todo aprovechado. La única ventaja que podemos ver en este aspecto, además de mantener un alto frame rate y sin tirones, es el tener una visión más definida, principalmente a lo lejos.

Las físicas me dejan un buen sabor de boca, con armas que reaccionan bastante bien, presentando detalles como un menor retroceso del arma al sostenerla con ambas manos, y otros como que, a diferencia de otros shooters, el añadir un supresor de ruido parece aumentar ligeramente el daño del arma (a costa de gastar puntos para añadirlo). Las armas de largo alcance pueden usarse con un zoom que se comporta muy similar a una mira telescópica real. Los saltos son algo que no me han terminado de cuadrar, pues a pesar de que algunos lo usen para dispararte desde atrás de algún montículo, en realidad casi nada es saltable, apenas alguna que otra cerca. El audio espacial está bien logrado de forma horizontal, he logrado distinguir muchas veces en qué dirección está alguien, aunque la distancia a la que se encuentra ya es menos notoria. Por otra parte, en el eje vertical puedes llegar a escuchar cerca a personas que se encuentren algún que otro piso por encima o debajo de ti, en general lo considero bastante bueno aunque mejorable.

En aspectos de fallos hay poco que sufrir, más allá de que se te caiga el arma y no la vuelvas a ver. En raras ocasiones encontrarás que el nombre de algún compañero desaparece y creerás que es un enemigo, o verás avatares con los brazos doblados dolorosamente. También el tracking funciona muy bien, apuntar resulta tan estable como tu pulso lo permita, incluso al acercar los mandos bastante a la cara, como al usar un arma de francotirador con mira telescópica. Solo hubo una ocasión en que el arma me comenzaba a mirar hacia arriba deliberadamente, sin volver a repetirse en la siguiente partida. Por otra parte, hay algo que no podría abordar como bug, pero sí lo incluyo como error de diseño, y es que al seleccionar una misión en single player tendrás que estar en la sala de espera unos 30 segundos hasta comenzar, pero si mueres no hay forma de respawnear, te devolverán a la pantalla inicial del juego, y si quieres intentarlo de nuevo deberás repetir el proceso, aunque por lo menos las pantallas de carga son bastante cortas, pero este ciclo sin fin resta las ganas de jugar las misiones.

Como nota adicional, se espera una actualización grande en abril según han comentado los desarrolladores, en donde además de un nuevo mapa, puede que nos den alguna que otra sorpresa interesante.

Conclusión

Contractors es un juego muy completo en su género, un FPS lo suficientemente realista para su estilo, resultando más que rejugable y competitivo al poseer una comunidad realmente activa, siendo todo un reto si buscas ir mejorando y aportando cada vez más bajas.

Los gráficos no son la panacea, pero la jugabilidad se mantiene. Además, los mapas son lo suficientemente variados, al igual que el set de armas. Eso sí, para realidad virtual le hacen falta muchas interacciones con el entorno que es posible que intentes para luego darte cuenta que solo es decorativo. El modo offline está entre descuidado y mal implementado, llegando a resultar frustrante, unido a unos tutoriales algo cortos que pueden llegar a generar una curva de dificultad algo alta al principio. La atmósfera que genera logra mantener una tensión digna de un campo de batalla, haciendo de cada esquina un tiroteo en potencia.

Cuantos más mejor. No resulta lo mismo estar solo que jugar en equipo e ir por un objetivo común. Además, si tienes con quien comunicarte, entra en juego la parte táctica, saber que alguien te cubre la espalda y de paso aumentar las posibilidades de victoria, así que si tienes algún amigo que también juega apresúrate a invitarlo a una partida.

Juego analizado en su versión de Quest 2.

Podemos ver el juego en acción, tanto en Quest como en PC, en esta parte del ROV Explorers #6.