Track Craft: ANÁLISIS

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ray_manta

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Track Craft: ANÁLISIS

Manejar cochecitos de juguete por toda la casa es algo divertido que todos habremos hecho alguna vez, y no ajeno a la VR, pero quizá estamos ante el título que mejor ha sabido trasladar esa experiencia a las posibilidades de la realidad mixta. Disponible para Quest 2/3/Pro y PICO Neo 3 Link/4/Ultra.

Micro coches, macro diversión

Aunque de pequeño nunca fui muy de jugar a coches, cuando iba a casa de unos primos que tenían un Scalextric, no paraba de insistir hasta que montaban un circuito, algo que llevaba su tiempo, y me dejaban manejar esos cochecitos. Luego, alguno de mis hermanos tuvo algún vehículo teledirigido, y cuando lo sacábamos a la plaza del pueblo, no parábamos de hacerle dar vueltas y trompos hasta que se le gastaban las pilas.

 

Ahora de mayorcito, con Track Craft he vuelto a revivir esas emociones, y experimentar otras nuevas, porque lo que ha conseguido el estudio checo Brainz Gamify es terminar de convencerme de que la realidad mixta tiene un brillante futuro, que en este juego ya es presente.

 

 

En realidad virtual hemos tenido buenos títulos que nos han permitido conducir coches en miniatura como Micro Machines: Mini Challenge Mayhem o Mini Motor Racing X, y me atrevería a asegurar que Track Craft los supera, especialmente si nuestro visor tiene Passthrough a todo color. En Quest 2 o Pico 3, sin duda casi mejor jugarlo en modo VR, que lo tiene.

Modo Arcade en solitario

El modo principal es un Hot Wheels con una serie de pistas ya montadas, con más o menos curvas, tirabuzones, saltos en el vacío, obstáculos y objetivos que cumplir, más allá de ir de la salida a la meta, si queremos conseguir una, dos o tres estrellas, que necesitaremos para desbloquear capítulos de la campaña para un jugador.

 

El diseño de estas pistas visualmente es fantástico, con una gran variedad de ambientaciones y diseños. Solo con colocarlas en medio de nuestra zona de juego, a la altura y tamaño que queramos, ya nos tiene embobados un rato, pues hay siempre varios elementos interactivos (drones, dirigibles, etc).

 

Pero aquí no hemos venido a mirar y tocar, sino a manejar cochecitos de juguete, que tendremos que ir desbloqueando y sacando de sus cajas de plástico. Los controladores Touch se convierten en el mando de radiocontrol, con los gatillos para frenar o acelerar/ir marcha atrás o hacia adelante, cualquiera de los dos sticks para girar, botones que usaremos para hacer piruetas y los pulsadores laterales para agarrar los circuitos para colocarlos en nuestro entorno o cambiar su tamaño.

 

 

Lo normal será jugarlo en tercera persona, pero existe la opción de hacerlo en primera persona si vuestro estómago lo soporta, porque entonces más que estar ante un título de conducción de mini coches, estamos ante un simulador de montaña rusa mortal.

 

La campaña, o modo arcade, se distribuye en cinco mundos con estética, mecánicas, vehículos y desafíos diferente. Sin terminar uno, no podemos pasar al siguiente, y hay que hacerlo habiendo conseguido un número de estrellas mínimo, por lo que tocará repetir circuitos hasta obtener las necesarias.

 

Hay más de 100 circuitos disponibles en total, y sí, los primeros son fáciles y se pueden superar en segundos, pero luego se van complicando. Así pues, solo con esta modalidad ya tenemos para horas de diversión.

 

Además, con este juego tenemos un coche de radiocontrol virtual que podemos manejar por toda la casa o por las calles y plazas del barrio, porque fue de los primeros títulos en los que no hay límites, sin barreras virtuales (Guardian).

 

Editor de niveles

Si completar ese centenar de pistas sin salirse de la carretera os parece poco, no hay problema. Track Craft incluye un buen editor de niveles con el que diseñar nuestros propios circuitos, y lo que es mejor, se pueden compartir. Además de los que construyamos nosotros, y gracias a una muy activa comunidad de jugadores, hay infinidad de ellos a nuestra entera disposición.

 

Modo multijugador

Esta modalidad, por desgracia, no es un Galaxy Kart, y solo nos deja competir contra el tiempo del rival. Quizá por eso, si no quedas con amigos o participas en uno de los campeonatos que se organizan, es más que probable que acabes jugando solo. 

 

De manera todavía experimental al escribir este análisis, desde la actualización v2.60 el juego incluye la función de editar, crear y competir con otros usuarios usando el escaneo de nuestra habitación como circuito de carreras. 

 

Aspectos técnicos y artísticos

Visualmente, las pistas son más gloriosas, quizás, que los cochecitos, aunque algunos modelos sí me gustaría poder convertirlos en reales con una impresora 3D. Los gráficos cumplen de sobra su función y, además, me encanta el diseño artístico en general de todo el juego (interfaz, escenarios).

 

Lo mismo podría decir del sonido, con detalles que dan muestra del mimo que se ha puesto en el juego, como que la bocina de cada vehículo suene, y lo haga con diferentes tonos. No es un punto negativo, pero una lástima que las cuatro voces que hay (expresiones para darnos ánimo cuando fallamos y cosas así), estén solo en inglés, como los menús, que tampoco están traducidos.

 

En cuanto a las físicas, el comportamiento de los mini-vehículos es más o menos correcto a la hora de girar, colisionar contra obstáculos o derrapar en superficies deslizantes (agua, aceite). Quizá son demasiado "todoterreno" a veces, y su comportamiento cuando saltan y tienen que hacer piruetas en el aire es irregular. El sistema de gravedad no es realista del todo, pero sí funcional, adaptado a la jugabilidad.

 

Conclusión

Aunque el juego ya no está en acceso anticipado, y en la actualidad ya es absolutamente recomendable, está claro que Track Craft crecerá en contenido y posibilidades. Su futuro se intuye aún más brillante, tanto por las aportaciones de la comunidad (circuitos desafiantes) como por los planes que tienen los desarrolladores, muy atentos a las sugerencias de los jugadores.

 

El juego ha sido analizado con Quest 3.

+ Divertido y adictivo

+ Fácil de jugar, difícil de dominar

+ Golosina visual

- Menús solo en inglés

- Sin multijugador en tiempo real

8 "Muy bueno"