The Inpatient: ANÁLISIS

Análisis de: The Inpatient

Los creadores de Until Dawn quisieron pasarse al mundo de la realidad virtual empezando desde lo más alto, ofreciéndonos 'joyas' como Until Dawn: Rush of Blood, el próximo Bravo Team o el videojuego de terror psicológico que procederemos a analizar a continuación. Si bien es cierto que se agradecen este tipo de lanzamientos, hay que seguir manteniendo los pies en el suelo y analizar estos títulos desde un punto objetivo y comparándolo con el mercado de videojuegos de realidad virtual actual.

The Inpatient es un mar de sentimientos encontrados, donde pasa de brillar a oscurecerse en cuestión de segundos, y es por eso que queremos extendernos un poco más en ciertos apartados para argumentar y explicar el por qué de muchas cosas.

Sin más preámbulos, empecemos.

Until Dawn, el título que nos ubicaba en la solitaria montaña nevada de Blackwood Montain, apareció en nuestras tiendas en pleno Agosto de 2015. Lo relevante de todo esto no era sacar un juego hibernal en pleno verano, sino que contenía los fundamentos principales de cualquier película de terror: Sustos, miedo y suspense. (Y bichos muy feos, por qué no decirlo...)

The Inpatient transcurre 60 años antes de los hechos transcurridos en Until Dawn, lo que eso significa que si hemos jugado previamente a dicho título, reconoceremos el sanatorio en el que transcurrirán todas nuestras experiencias, y en el caso de que no lo hayamos hecho (lo cual es un pecado, desde aquí os lo decimos...) no tendrás ningún problema en entender y progresar en la historia. Eso sí, es altamente recomendable.

The Inpatient emplea una interfaz limpia donde, una vez estemos jugando, solo nos aparecerán textos a la hora de tomar decisiones (a no ser que tengamos los subtítulos activados). Es cierto que algunas veces podemos contemplar textos borrosos, pero se entienden a la perfección en todo momento.

Ejemplo:

Si yo quiero responder: "Déjame en paz.", detrás de dicho texto nos aparecerá: "ENFADADO" para que sepamos la tonalidad o el estado anímico de la respuesta, pero dicho texto suele estar borroso.

Gracias al sistema de voz que implementa The Inpatient, podremos marcar nuestras respuestas hablando en voz alta, así que en vez de marcar la respuesta A o B con nuestros mandos, podremos decir en voz alta "Déjame en paz." y se auto-seleccionará la respuesta elegida. Debemos admitir que utilizamos este sistema al principio, pero después dejamos de utilizarlo porque nos encontrábamos más cómodos con el sistema tradicional, pero en todo momento funcionó a la perfección y ofrecía un 'plus' de libertad.

El menú principal o de pausa es sencillo a la vez que útil, ya que no será necesario acceder a ningún menú durante todo el trayecto de nuestra historia, a no ser que queramos revisar los 'recuerdos' y 'efectos mariposa' a modo de historial. Ambos aspectos nos irán apareciendo mientras vayamos avanzando en la historia, señalados con una luz brillante y contorneada, y pueden surgir en diversos objetos y complementos que nos ofrecerán visiones del pasado.

El juego nos permitirá desde un principio elegir si queremos ser hombre o mujer, nuestro color de piel y si queremos utilizar el sistema de voz que hemos nombrado anteriormente, con la posibilidad de activarlo o desactivarlo cuando nos apetezca.

Las decisiones se tomarán mirándolas con la cabeza y marcándolas pulsando un botón.

Debemos señalar que hemos jugado 2 partidas, una utilizando el sistema de Playstation Move con un varón de raza blanca y la segunda con un mando Dualshock y una mujer de raza negra. Las diferencias entre elegir una cosa u otra varían en el sexo, ya que dependiendo de nuestra elección se modificarán mínimamente las respuestas, nos hablarán en relación al sexo elegido y lo más importante: cambiará algún personaje principal.

Tal y como hemos comentado anteriormente, toda la historia transcurre en el sanatorio de Blackwood, y eso significa que en toda 'nuestra estancia' va a haber pasillos, pasillos y más pasillos. ¿Estás cansado de pasillos? Pues toma un par más.

"The Inpatient roza considerarse un walking simulator de terror, pero gracias a la atmósfera y al ambiente que consigue transmitir, logra diferenciarse como algo único aunque breve."

Creemos que éste es el apartado más duro que va a recibir este título, y es que la falta de originalidad aparece por todas partes en lo que al mapeado se refiere. Los hospitales y sanatorios son algo más que tratado en el mundo del terror y los videojuegos, y cuando llevas 1 hora jugando, te empiezas a dar cuenta de que tu entorno prácticamente no varía, no paras de andar y percatarte de que no ocurre nada relevante a tu alrededor, convirtiéndolo tal vez en un monotonía pasajera. Porque cuando has visto más de 10 pasillos y túneles, no quieres visitar otros 15 más.

Es difícil explicar este apartado sin aplicar spoilers, pero los mapeados, los objetos, el mobiliario en general y ciertos 'sprites' y texturas, dejan mucho que desear.

Ha habido algunas controversias respecto al sistema de movimiento de The Inpatient, debido a que sea cual sea el sistema que utilices (bien mandos PlayStation Move, bien Dualshock), puede ser algo confuso utilizarlo e incluso llegar a desesperar, pero bajo nuestro punto de vista resulta muy bueno, sencillo, práctico y no marea en ningún momento del juego. Hay que admitir que con ambos sistemas lo pasamos igual de bien, y más aún sabiendo que el juego está pensado para jugarlo tanto sentado como de pie.

En algunos momentos nuestro personaje permanecerá sentado, como cuando visitemos el sanatorio en silla de ruedas al inicio del juego.

PlayStation Move

El hecho de jugar con los mandos Playstation Move nos permitirá tener más precisión a la hora de recoger objetos o interactuar con nuestro alrededor, pero es importante señalar que la interacción con los objetos es mínima; con ellos no podremos hacer mucho más que recoger un par de vasos y lanzarlos. Eso sí, si utilizamos dichos mandos podremos descubrir algún que otro secreto que en el caso del control tradicional no veríamos.

DualShock4

A la hora de jugar con un mando Dualshock, éste solo nos permitirá recoger los objetos "obligatorios" y utilizar la linterna para iluminar el camino, que con la ayuda del giroscopio nos permitirá girar y contemplarlos para verlos con más claridad.

Nota

Al utilizar los mandos Move, podremos apagar y encender la linterna que llevemos encima, a diferencia que con el mando DualShock4. Pero eso es algo totalmente irrelevante ya que en ningún momento del juego será importante el estado de la misma.

Así que en resumen, la interacción con nuestro alrededor es bastante escasa.

Si tuviésemos que definir el aspecto gráfico y sonoro de The Inpatient, sería sobresaliente. Hay que admitir que estamos viviendo "los inicios" de la realidad virtual y que actualmente el apartado gráfico flaquea en todos los dispositivos del mercado. Sabemos que vamos a tener que contemplar texturas de baja resolución y modelos de baja calidad, pero Supermassive Games ha hecho un estupendo trabajo en los modelados y ha logrado que cada personaje desprenda vida y sean dignos de admirar el mimo y cuidado que contiene.

Además, el aspecto sonoro 3D es una delicia, añadiendo sonidos y ruidos en los momentos idóneos para meternos en tensión e implementando además un excelente doblaje al castellano.

Como contra, las animaciones y el lipsync de los personajes deja un poco que desear, pero llega a puntos comprensibles.

En todo momento tendremos tensión, miedo y preguntas, muchas preguntas. Y realmente eso es lo que importa, que nos tengan enganchados durante las 2 horas y media que dura la experiencia.

"Sabemos que estamos en un sanatorio, sabemos que estamos locos o que algo extraño ocurre, y eso es lo que importa."

Durante el transcurso de la historia, tendremos puntos de guardado camuflados como "mini-desmayos". Es cierto que al principio de la historia cada uno de ellos cobra un sentido, pero mientras progresamos, pierde toda la lógica y pasan a ser "parpadeos" sin sentido, pero tampoco podemos pedir que cada punto de carga tenga un significado.

La historia que nos narra The Inpatient es bastante profunda y llena de flashbacks, por lo que puede conducirnos a quedarnos con unos cuantos interrogantes al finalizar el juego. Desde aquí os recomendamos que, una vez lo finalicéis, juguéis otra partida tomando decisiones contrarias, porque dependiendo de las elecciones que hayáis seleccionado os habréis perdido algunas de las mejores escenas del juego, sobre todo las del final, las cuales echamos en falta durante todo el videojuego.

Al final del todo, tras haber terminado los créditos, haced clic en "Continuar" y elegid otras opciones en 'ya sabéis donde' (Sistema Anti-Spoilers), porque hay más de 5 o 6 finales, o al menos esos son los que hemos podido encontrar.

Sin más preámbulos, bienvenidos al sanatorio.