Aún queda por ver cuál será la apuesta de las compañías que nos brindarán a partir de este año este nuevo estándar de visores de realidad virtual y aumentada conectados por USB-C a un smartphone, pero lo que sí podemos hacer ya es preguntarnos si el requerimiento del móvil nos supondrá una barrera a la hora de valorar su compra, o, por el contrario, nos parece una gran idea accesible y usable para lograr visores muy ligeros, algo que no suele ser la tónica actual de los standalone.
Como siempre, os invitamos a compartir el motivo de vuestra elección en los comentarios.
VR is here!