Lucky's Tale: ANÁLISIS

Salva a tu mejor amigo el cerdito

A continuación tenemos el análisis completo enfocado en la versión de Quest, y luego, tras la Conclusión, tenemos un anexo para la versión de PlayStation VR.

La aventura de Playful, que fue uno de los títulos de lanzamiento del primer visor comercial de Oculus, da el salto ahora a Quest 2. Lucky’s Tale nos propone ser el ayudante de un inteligente zorro que se embarca en un viaje de salvación a lo largo de 5 capítulos y 14 niveles jugables (13 fases y el combate contra el jefe final). Lucky Swiftail tendrá que salvar a su amigo el cerdito Piggy de los tentáculos del malvado pulpo de tres ojos Glorp. La historia no se desarrolla más allá de tres o cuatro líneas por capítulo, y ni siquiera contamos con un narrador ni con ninguna voz en off que nos vaya poniendo en situación (a excepción de la intro), como sí sucedía en otro videojuego exponente de plataformas en 3D como fue Moss, en el que la narrativa cobraba un peso mucho mayor que en este Lucky’s Tale.

El universo de este adorable zorro es muy colorido y bello, y nos veremos atravesando paisajes muy logrados y con una escala de colores que nos enamorará. Si buscas un buen plataformas 3D para seguir exprimiendo tu visor, sin duda es una grandísima propuesta que consigue entretener sin llegar a ser un reto (al menos en sus niveles de la historia). ¿Ayudarás a Lucky Swiftail a salvar a su amigo?

Entramos dentro de su universo desde el primer minuto

El videojuego nos introduce en su mundo casi desde un inicio, y el menú inicial prácticamente será el primer nivel del juego. Crearemos un perfil y una ranura de guardado y ya podremos acceder a un paisaje en el que encontraremos un libro que servirá como mapamundi. Cada vez que pasemos una página cambiaremos de nivel, y para poder hacerlo deberemos haber completado el nivel anterior.

Sus mecánicas y controles son muy sencillos. Tendremos un botón para saltar (se podrá hacer incluso un doble salto) y otro botón para golpear. Con el joystick izquierdo manejaremos el movimiento del personaje y con el derecho manejaremos la cámara. El visor también aprovechará nuestra mirada para permitirnos ver qué hay debajo, arriba o en los laterales, y en cualquier momento podremos girar nuestra cabeza para ver qué hay a nuestro alrededor. Cabe resaltar que ha habido momentos en los que el movimiento de cámara nos ha producido un ligero mareo y esta funcionalidad no está demasiado bien ajustada, además de que tampoco se nos permite suavizar el efecto en las opciones de configuración. Tras varios minutos jugando la sensación se reduce, pero en una primera toma de contacto deberemos tener cuidado hasta acostumbrarnos a su funcionamiento. Recomendamos jugar sentados para evitar que la sensación de mareo vaya a más.

En determinados momentos de la aventura podremos recoger unas bombas con el protagonista, y la forma en la que apuntaremos será moviendo la cabeza para seleccionar la dirección y con el gatillo del mando derecho lanzaremos la bomba. Esta será la única ocasión en la que actuaremos de forma omnisciente ayudando al personaje, en ningún otro momento de la aventura volveremos a participar ni se nos interpelará para introducirnos en la historia.

Nuestra ventaja como jugadores de VR será ese juego de perspectiva mediante el cual podremos ver todo lo que sucede en el escenario y jugar con las alturas y las dimensiones. Lucky’s Tale es un plataformas en tres dimensiones que llega para encumbrar un género que ya cuenta con excelentes exponentes en realidad virtual, como Astro Bot: Rescue Mission y Ven VR por citar dos ejemplos. Los niveles irán aumentando de dificultad sin llegar a ser un reto y podremos completar los 13 niveles + el enfrentamiento contra el jefe final en unas 2 horas de juego. Lucky conseguirá una vida cada vez que acumule 100 monedas y también iremos encontrando vidas extra por el escenario.

Terminarlo es fácil, completarlo al 100% es un desafío

Sin embargo, y como suele suceder con todos los juegos de plataformas, el verdadero reto en Lucky’s Tale no consiste en ver los créditos finales, sino que será completar la aventura al 100%. Una vez hayamos terminado sus 13 niveles podremos rejugarlos con dos objetivos diferentes. El primero de ellos y más asequible será conseguir una cantidad concreta de monedas rojas ocultas a lo largo de todo el nivel. Deberemos buscar en todos los rincones para conseguir el 100% y conseguir una calificación de oro en esa prueba. En segundo lugar y mucho más complicado tenemos el modo contrarreloj, con un minutaje para el oro, otro para la plata y otro para el bronce. Debemos comentar que conseguir un oro en según qué niveles es una tarea francamente imposible y solo al alcance de los más hábiles jugadores. Conseguir un bronce es sencillo, alcanzar la plata es posible... pero para el oro deberemos entrenar y probar otra vez hasta descubrir todos los atajos.

Pero el contenido de Lucky’s Tale no se queda ahí, sino que también tendremos que encontrar unos regalos ocultos en cada nivel que desbloquearán unas figuras que podremos ver en cada nivel dentro del libro-menú, una suerte de coleccionables que estarán repartidos por cada nivel y que para conseguirlos tendremos que evitar la muerte desde el momento en el que los adquiramos. De cualquier otra forma lo perderemos, y nos tocará volver a su ubicación exacta y terminar el nivel sin ningún tipo de fallo. Por lo tanto, lo que en principio parecía ser un videojuego de dos horas de duración se puede duplicar o incluso triplicar dependiendo de las horas que queramos dedicar a tratar de conseguir la mejor puntuación en todas los niveles de contrarreloj.

Un apartado gráfico y musical a la altura

Lucky’s Tale ofrece un trabajo técnico al nivel de otros títulos del género y nos enamorará tanto por el diseño de su personaje principal como por los detalles y animaciones de todos los enemigos. Lucky Swiftail es adorable, así como su amigo Peggy (aunque aparezca unos breves instantes durante la aventura). Nos quedaremos embobados viendo sus escenarios y querremos repetir una y otra vez los niveles para no salir de su universo.

La banda sonora acompaña con composiciones melódicas y pausadas que nos hacen vivir una gran experiencia a los mandos de nuestro visor. Sin embargo se queda un escalón por debajo en epicidad con respecto a otros títulos como Moss, que sí que supieron introducir la música perfecta en el momento exacto. Hemos echado de menos un narrador con voz en off que fuese introduciendo más detalles sobre su historia y nos ha sabido a poco el apartado sonoro en ese aspecto. Eso sí, el título llega traducido a nuestro idioma (entre otros).

Conclusión

Lucky’s Tale consigue mantenernos pegados a nuestro visor en su modo historia gracias a su apartado visual y a su entretenida jugabilidad, y hará que volvamos al título debido al reto que suponen sus misiones o niveles secundarios. Si te gustan los plataformas en tres dimensiones y quieres pasar un rato divertido, este juego cumplirá con creces las expectativas. Una lástima que no trabaje más su apartado narrativo y que no ofrezca un modo historia de mayor duración.

El juego ha sido analizado en Oculus Quest 2.

Versión de PSVR (Dark)

Han pasado la friolera de seis años para poder disfrutar de este Lucky’s Tale VR fuera de plataformas Meta, y lo cierto que es durante todo este tiempo ha habido lugar a pocos juegos de plataformas que sacien la sed de los aficionados.

Recorrer los mundos es muy divertido y satisfactorio visualmente.

Si bien es cierto que Astro Bot Rescue Mission juega en otra liga, los chicos de Playful se sacaron de la manga un producto más que competente y divertido.

Una estructura ya conocida

Como todo buen plataformas, la recolección de monedas está a la orden del día para... Eso es, conseguir vidas extra y de paso mejorar nuestra puntuación. DualShock 4 en mano, cual juego tradicional, y sin uso alguno del sensor de movimiento.

Aparte de esto, tocará enfrentarse a diferentes insectos y animales saltando sobre ellos o pegando un coletazo. Otra opción será lanzarles pelotas repartidas por los escenarios para dejarles grogui o lanzar bombas apuntando con la vista, algo que funciona de forma intuitiva sin problemas de tracking.

La mecánica más VR: Apuntar con nuestra vista.

Dentro de su linealidad tenemos caminos alternativos donde encontrar tesoros, además de algunas zonas en túneles donde la vista pasa a ser completamente lateral cambiando también nuestra percepción y escala del mundo.

El apartado visual es agradable, lleno de color y con detalles por doquier

Un colorido mundo

Patente queda su agradable apartado visual, lleno de color y detalles por doquier que más de una vez nos dejará embobados observando cada uno de los rincones de unos escenarios que van más allá de la zona de juego con una definición de imagen digna de mención.

A medida que Lucky avanza la cámara se mueve con él, bien de forma lateral o siguiéndolo, para ofrecer la mejor vista posible de cara a la acción. Esto inicialmente nos hará sentirnos algo incómodos, sin llegar a marear, sobre todo cuando tenemos al personaje cerca de la cámara y poco a poco comienza a alejarse de ella.

Derrotar enemigos en un mismo salto se ve recompensado con puntos extra.

Cualquier rincón del mundo que propone está bien resuelto y lleno de vida: molinos que giran, fauna de atrezo, un volcán en erupción... Todo con un estilo visual muy cartoon, sin uso prácticamente de ninguna textura, confiando únicamente en su geometría y los volúmenes que eso provoca.

Nuestro héroe además se mueve de maravilla, y aunque solo puede saltar y golpear con la cola, es suficiente como para resultar muy satisfactorio. Una lástima que el doble salto "patine" algo más de la cuenta y nos cueste algo hacernos a él.

Divertido... y breve

Lucky’s Tale VR ofrece diferentes mundos y niveles que nos mantendrán pegados a nuestras gafas un par de horas hasta completar su historia. Por suerte, a sabiendas de su reducida duración, tenemos algunos extras que alargarán la vida útil del título un par de tardes más.

Su duración es demasiado reducida, aunque sus pruebas contrarreloj son muy retadoras si quieres algar su vida útil

A saber. Lo primero es el inevitable modo contrarreloj, ofreciendo el hueso más duro de roer con un verdadero desafío si nos queremos hacer con las medallas de oro de cada nivel. Aquí la velocidad del scroll puede jugarnos malas pasadas teniendo que girar nuestro cuello más de la cuenta para poder seguir la acción correctamente.

Además de esto contamos con un modo donde buscar monedas rojas escondidas donde nos guiaremos por el sonido 3D para dar con su ubicación. Podría estar mejor resuelto, pero funciona.

Por último, algo que podemos encontrar en la primera partida: unos regalos que desbloquearán dioramas no muy escondidos. Algo decepcionante es la forma de verlos, sin posibilidad de rodearlos con nuestra vista limitándose a incluirlo como parte del libro de navegación

Aunque lineales, siempre tenemos algún que otro camino alternativo y secretos varios

Conclusión

Lucky’s Tale VR es una propuesta plataformera muy agradable, divertida y tremendamente visual. Esta versión para PSVR es nítida, suave y tan disfrutable como la que más contando con tiempo de carga casi nulos.

Es cierto que resulta demasiado corto, no aporta nada novedoso ni supone reto alguno más allá de las medallas contrarreloj… pero Playful sabe que siempre hay ganas de un juego de plataformas con tanto encanto como este.

Análisis realizado sobre la versión PSVR en PlayStation 4 Pro.