Somos un centro de psicoterapia que trabajamos con RV, y nos gustaría compartir nuestra experiencia en ese foro. Hace poco que incorporamos esa herramienta, y la verdad, está siendo muy interesante.
Utilizamos la plataforma PSIOUS. Por lo que hemos visto hay ya diversas empresas que ofrecen el servicio de RV para psicólogos. Si alguien las conoce de primera mano, sería fabuloso compartir y contrastar información.
El dispositivo de RV que utilizamos es Gear VR con Samsung S6.
De entrada, ¿qué aporta la realidad virtual a la psicoterapia? Así muy resumido, podríamos decir que hace de puente entre la consulta y la realidad cotidiana del paciente. Ese punto es crucial, pues cuando se trata de fobias y ansiedades, la distancia entre la consulta del terapeuta y la vida real del paciente hace difícil recrear en terapia las situaciones que desencadenan las respuestas ansiosas. La Realidad Virtual permite, en cambio, salvar esta distancia. Podemos interactuar en entornos específicos, donde se alcanza un grado de realismo inédito.
Esta semana, por ejemplo, trabajamos ansiedad social en una chica que es fisioterapeuta; cada quince días tiene reunión de equipo en la residencia donde trabaja, y lo pasa muy mal. Pues bién, hemos empezado con una exposición gradual mediante RV a reuniones de equipo. Ella se pone las gafas Gear VR, y nosotros la llevamos a un entorno que se llama precisamente Reunión de Equipo. ¿Funciona? Esta pregunta nos la hicimos al inicio, ¿era la RV suficientemente creible para suscitar fobia o ansiedad? Pues en muchos de los casos hemos comprovado que sí ocurre, como en el caso de esta chica. Y en ocasiones es incluso contundente. Debe irse con cuidado.
No hemos probado clínicamente aún todos los entornos. A parte, que no todos son para generar ansiedad o fobia, algunos buscan el efecto contrario, son entornos de relajación y mindfulness. También muy interesantes. Ya iremos contando.
Finalmente, decir que la RV tiene de momento límites importantes en psicoterapia. Hasta donde hemos visto, está muy enfocada al tratamiento cognitivo-conductual, y por lo tanto excluye un abanico importante de demandas terapéuticas. Pero para nosotros, que precisamente ibamos fuertes en existencialismo, constructivismo y psicología relacional, la RV está siendo un complemento genial para un enfoque más integral.