Portátil Mountain Graphite VR

Rendimiento

Puesto que el objetivo de este análisis es comprobar las prestaciones del portátil en realidad virtual, no veréis aquí los benchmarks habituales basados en algunos de los videojuegos más conocidos, sin embargo sí que hemos ejecutado 3DMark, que nos permite comparar el rendimiento del equipo con el de un PC “apto” para la realidad virtual, y lo hemos comparado con uno de nuestros PCs de escritorio que también cuenta con la GTX 980, y aunque su CPU es inferior a la del Graphite VR, creemos que es suficiente para comparar el rendimiento del portátil con un PC de escritorio con unos componentes muy parecidos, ya que la gráfica siempre suele ser la que limita el rendimiento. Esta es la configuración de nuestro PC:

• Intel i5-3450
• Placa base: MSI Z77A-G43
• Memoria: 16 GB 800 Mhz
• Disco: Samsung 850 EVO
• Windows 10 Pro

Pero antes veamos el rendimiento del disco SSD, un Samsung SM951 M.2 NVMe de 512 GB, que no es otra cosa que el precursor del actual 950 Pro del fabricante coreano, destinado únicamente a los ensambladores, aunque hace algunos meses hemos llegado a verlo disponible en algunas tiendas online para el público. El resultado es sencillamente espectacular, ofreciendo una velocidad que supera los 2.2 Gb/s y que ronda los 1.6 en lectura. Windows 8.1, que es el sistema operativo instalado por defecto en el Graphite VR, arranca en apenas 5 segundos, y los números de ATTO y CrystalDiskMark hablan por sí mismos.

Firemark Extreme

Palmer Luckey indicó que cualquier PC que supere los 9.000 puntos en este benchmark estará capacitado para ejecutar aplicaciones y juegos de realidad virtual con la versión comercial del Rift, y vemos que el Graphite VR supera los 11.000, con lo que se demuestra que es un equipo más que capacitado para la tarea, superando tanto a nuestro PC de escritorio, que se sitúa en segunda posición, como al PC mínimo recomendado por Oculus con una GTX 970, que apenas supera la barrera indicada por Luckey.