Star Wars Pinball VR: ANÁLISIS

Un pinball con fuerza

La estrecha relación de la saga galáctica de George Lucas con los videojuegos se remonta a los inicios de la industria casi de forma inherente. No han sido pocos y memorables los títulos que nos han acompañado a lo largo de estos años y que, sin lugar a dudas, continuarán haciéndolo con productos de toda índole, como bien puede ser el presente Star Wars Pinball VR.

Los más viejos del lugar recordarán jugar algunas partidas a la máquina de "petacos" fabricada por Data East de un ya lejano 1992 en algún bar o recreativos de su ciudad. Si bien es cierto que de Star Wars únicamente se han diseñado tres máquinas tradicionales, su paso por los "flippers" virtuales es mucho más habitual gracias al trabajo de Zen Studios a lo largo, sobre todo, de estos últimos años.

Pensadas para ser disfrutadas por todo tipo de jugadores, las mesas que nos propone este Star Wars Pinball VR se componen de elementos físicos y otros muchos virtuales que le otorgan una dimensión imposible de conseguir en una máquina tradicional, pero sin perder su base jugable y pensando únicamente en el espectáculo.

Es una lástima que, tras una versión completísima para Nintendo Switch, encontremos adaptadas menos de la mitad de las mesas a la realidad virtual, contando con 8 en total. Eso sí, de excelente diseño, siendo dos de ellas completamente nuevas.

Una habitación de ensueño

Pero antes de ponernos a desgastar nuestros gatillos, aparecemos en una habitación totalmente decorada con elementos de Star Wars. O al menos eso parece, ya que uno de nuestros objetivos será conseguir multitud de objetos de colección para sentirla como nuestra. Podemos movernos libremente y en primera persona por ella, y podremos desbloquear figuras, posters, cascos o temas musicales para la gramola… ¿Cómo lo haremos? Jugando a las máquinas de pinball.

Con un modo carrera presentado en forma de misiones, el juego nos propone superar una puntuación concreta en las diferentes mesas disponibles con limitaciones tales como tiempo, número de bolas o golpes. En función de los puntos conseguidos, podemos obtener hasta tres medallas y pasar a la siguiente misión. En total encontramos unas 50 misiones repartidas en 5 grupos que se irán desbloqueando a medida que progresemos en ellos. 

Además, solo por jugar y acumular puntos, se nos obsequiará con los elementos decorativos mencionados anteriormente, lo que sin duda es un aliciente para seguir jugando y, de paso, conseguir un mejor puesto en la clasificación online que ofrece (aunque presenta problemas de sincronización en el momento del análisis).

Desbloquear objetos de colección para decorar la habitación perfecta será uno de nuestros objetivos

Las medallas conseguidas sirven para desbloquear poderes de la fuerza y talentos. Éstos, siempre de modo opcional, nos permiten potenciar algunas formas de sumar puntos extra al hacer rebotar la bola en los bumpers, o incrementar la puntuación por tener la bola más tiempo en juego. Todos estos poderes pueden incrementar su nivel para mejorar todavía más cada una de sus características, pero siempre teniendo en cuenta que solo pueden equiparse algunos de ellos al mismo tiempo (dos poderes y un talento), por lo que influye tanto nuestro estilo de juego como la mesa de juego para equipar el más conveniente.

Mesas para todos los gustos

Desde la más actual de la exitosa The Mandalorian hasta una tematizada por figuras coleccionables clásicas de la serie, las mesas se basan en diferentes partes del universo Star Wars. Llama la atención la inclusión únicamente de las tres películas numeradas originales, lo que da pie a tener futuros DLCs para completar la saga Skywalker. En cualquier caso, las mesas seleccionadas son todo un ejemplo de diseño y de la experiencia que sus desarrolladores han ido obteniendo a lo largo de los años.

Cualquiera de las mesas está cuidada hasta el más mínimo detalle a todos los niveles. Mecánicamente se recrean multitud de escenas familiares para todos los fans haciéndonos partícipes incluso de los emblemáticos duelos de espadas láser, bien con figuras a golpear en la zona de juego, bien metiéndonos, literalmente, bajo la piel de Luke Skywalker para enfrentarnos a Darth Vader en uno de los minijuegos inmersivos incluidos. En estos últimos realizamos varias acciones con el mismo control que en las mesas con los dos flippers y el botón de acción o lanzar bola, así nos defenderemos de los espadazos de Vader acertando la dirección del ataque o dirigiremos la dirección del lanzallamas de nuestro querido mandaloriano. Todo esto con Dualshock 4 en mano, como viene siendo habitual asignando un gatillo a cada flipper y un botón como complemento para una tercera acción.

Además, las fases de bonificación tienen diferentes escenas a recrear que nosotros mismos elegiremos, por lo que las posibilidades dentro de un mismo tablero se multiplican, basándose, eso sí, en las reglas de todo buen pinball: golpear los puntos marcados, pasar por las zonas iluminadas o recolectar todas las partes que componen una palabra.

Las mesas son todo un ejemplo de diseño y de la experiencia que Zen Studios ha ido obteniendo a lo largo de los años

Antes mencionamos la inclusión de elementos virtuales, y es que algunas mesas se permiten incluir puentes holográficos, objetos flotantes y por supuesto multitud de "juguetes" animados. Sin duda uno de los puntos que otorga más viveza a los juegos de Zen Studios es incluir personajes vivos dentro de las zonas de juego con persecuciones, combates y todo tipo de situaciones de las que somos partícipes con nuestras acciones.

Por si no fuera suficiente, cada mesa viene acompañada por la presencia de personajes alrededor de la mesa, como el mismísimo maestro Yoda entre muchos otros. Eso sí, contando con un aspecto relativamente "modesto" y no del todo creíble.

Y es que el juego no destaca especialmente por su apartado técnico, mostrando modelados simplemente "cumplidores", al igual que las texturas que los acompañan. Hacen su papel y, sin duda, para un juego de estas características no es necesario mucho más, pero sí que resta algo de inmersión en ocasiones.

Algo más preocupante es la definición de los tableros, no por el juego en sí, más bien por la limitación que ofrecen los visores. Al tratarse de elementos pequeños a cierta distancia, no se ve tan nítido como nos gustaría y resta realismo como para darnos cuenta de que no estamos, todavía, ante el sucesor definitivo de las tradicionales máquinas de pinball, todo esto probándolo con PSVR. Sin embargo, existe un modo inmersivo que nos coloca dentro de la máquina junto a los flippers y que, aunque resulta injugable, nos damos cuenta del cambio de definición de los elementos, y sin duda nos hace pensar que, de verse así el juego en su cámara estándar, sería una experiencia muchísimo más realista y completa.

La música de John Williams pone la guinda a un apartado sonoro muy cuidado

Para rematar, como no podía ser de otro modo, la música de John Williams acompaña nuestras sesiones de juego y, junto con los efectos de sonidos de las mesas extraídos directamente de las películas y la multitud de voces que acompañan a la acción, hacen destacar este apartado por encima de todos.

Conclusión

Star Wars Pinball VR es todo un homenaje a los fans del universo en el que se basa. El mimo y detalle puestos en cada mesa, junto a la jugabilidad inmortal de los "flippers", aderezado todo ello con una legendaria banda sonora y una habitación que es todo un regalo para el coleccionista le convierten en un juego notable para la realidad virtual, que además tiene textos en castellano.

Quizá no es la versión más completa, y la limitación de resolución en algunos visores impide que su realismo sea mayor, pero seas o no fan de La Guerra de las Galaxias, su diseño de mesas hará que pasen las horas volando sin necesidad de echar monedas en los añorados recreativos de tu infancia.

El juego ha sido analizado con la versión de PSVR en PS4 Pro.