Shadow Point: ANÁLISIS

En busca de la niña perdida

Nada menos que tres años después de su estreno, el juego de puzles desarrollado por Coatsink en colaboración con Oculus Studios llega a PlayStation VR para demostrar su calidad a través del tiempo. Y nunca mejor dicho…

Y es que bajo la piel de Alex Burkett decidimos esclarecer la misteriosa desaparición de una niña doce años atrás. Lorna McCabe se esfumó en una excursión escolar al observatorio de Shadow Point, y para poder descubrir la verdad de lo sucedido cruzaremos portales mágicos que juguetean con el tiempo si conseguimos solventar todos sus rompecabezas.

Una historia entre sombras

Por algún motivo desconocido, desde el observatorio cruzaremos portales en los cuales la luz y la sombra juegan un papel fundamental. Cada uno de ellos se compone a su vez de varios puzles, que al resolverse nos abrirán el portal a una nueva zona y, de paso, nos permitirá avanzar en el caso de la niña desaparecida.

Al conseguir la silueta correcta completamos los diferentes rompecabezas.

La mecánica es sencilla: debemos encontrar los objetos adecuados para, cuales sombras chinescas, proyectar la sombra que encaje con la silueta de unos extraños paneles. A priori no parece complicado, pero aquí entran en juego faros que proyectan luz, portales ocultos, lentes cambia formas o la misma gravedad.

Desarrollándose de forma gradual, desde la sencillez de los primeros puzles a los más complejos durante las al menos cuatro horas de aventura, descubriremos nuevas mecánicas y soluciones basadas en la lógica y agudeza visual.

Cada portal da paso a una zona cerrada donde resolver todos los acertijos, muchos de ellos dependientes entre sí, por lo que tocará localizar los objetos que puedan ayudarnos a progresar. Al cogerlos, éstos se añadirán automáticamente a nuestra mochila (algo muy poco intuitivo inicialmente) para recurrir a ellos cuando sea necesario.

La resolución de los puzles se basa en la proyección de sombras, pero participan múltiples factores antes de ello

Este sistema no es el más ágil del mundo, pero al final uno se acaba acostumbrando y funciona. Para muchos quizá los escenarios se vuelvan algo artificiales al no poder interactuar con los objetos que no nos ayuden en la aventura, pero también es cierto que focaliza el esfuerzo de resolución y experimentación innecesaria.

Para la versión que nos atañe se ha omitido el desplazamiento suave, algo que no sería un problema en un título de esta categoría, si no fuera porque el teletransporte a veces nos juega malas pasadas forzando ciertas posiciones para resolver enigmas que no están muy bien medidas… Por ejemplo, tendremos que movernos más de la cuenta para tirar de una cadena por estar demasiado lejos, o situaciones parecidas rompiendo algo la inmersión

La narrativa es ligera, constante y con un importante trasfondo.

Mención especial para los puzles con gravedad de por medio, resultando los más satisfactorios una vez resueltos, pero también los más difíciles de comprender, y es que el juego no da pie a entenderlos de la forma correcta.

Low Poly onírico

Shadow Point sorprende por su nitidez visual y cuidado estilo gráfico. El modelado de personajes y escenarios no deja de ser correcto, pero la elección de la paleta de colores, muy agradable, y el arte general que posee lo convierten en una agradable experiencia, ligera y muy adecuada para su ritmo pausado de juego. Por contra, todo el trabajo de texturas es muy mejorable, con poca definición general y tampoco muy trabajadas, dando el mayor peso a las diferentes sombras que crea su naturaleza poligonal.

La variedad de escenarios cumple con su papel con algunas estampas muy bonitas aderezadas por una banda sonora cumplidora que sabe acompañar adecuadamente y un doblaje en español latino que favorece a la inmersión de los hispanohablantes, que tan mal cuidados están en este sentido dentro de la realidad virtual.

Su estilo visual y narrativo le confieren una fuerte personalidad

Mención aparte es la colaboración como narrador de Sir Patrick Stewart obviamente para su doblaje en inglés.

Un mundo conectado

Como ya hemos comentado, el título de Coatsink nos mantendrá ocupados durante unas cuatro horas en su historia principal si superamos todo sin problemas, alargándose algo más si completamos los puzles Luna.

Éstos están presentes en los diferentes capítulos principales, pero siempre como opcionales, siendo los más complejos de completar, y que nos permitirán acceder al desafío final para esclarecer todos los detalles de la trama, siendo además aptos solo para los jugadores más avispados.

La dirección de arte es fantástica.

Conclusión

Shadow Point es una aventura de puzles muy original e interesante que saca partido a la interacción con los objetos que ofrece la realidad virtual, recubierta por un gran peso de la narrativa combinando el mundo real y la fantasía con un importante mensaje final.

Una lástima que la comprensión de algunos puzles, la limitada interacción con el entorno y el teletransporte empañen ligeramente el resultado final de uno de los mejores títulos que podemos encontrar en el género.

El juego ha sido analizado en PSVR con PS4 Pro.